13 enero 2009

El crédito se encarece y la Súper obliga a subir las previsiones

Datos del Banco Central de Bolivia (BCB) revelan que la tasa de interés para préstamos comerciales en moneda extranjera subió en los últimos tres meses entre 0,14 y 2,51 puntos, y para créditos hipotecarios, entre 0,95 y 2,75 puntos.

La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) advirtió que las tasas pueden elevarse más debido a una reciente normativa de la Superintendencia de Bancos y Entidades Financieras que obliga a los bancos a efectuar previsiones adicionales en su cartera para afrontar en mejores condiciones la crisis internacional y problemas de mora.

Los efectos de la crítica situación económica en Estados Unidos y Europa ya golpea al

país con la caída de precios de las materias primas de exportación, particularmente minerales, con el cierre de mercados.

La Confederación de Empresarios Privados y dos analistas opinan que el sistema bancario encareció el crédito como una respuesta anticipada a la crisis por efecto de la inflación y que las nuevas exigencias de la reguladora limitarán el crecimiento del sector productivo.

Según los datos del BCB, la tasa de interés para créditos comerciales en el Mercantil Santa Cruz subió de 8,49 por ciento en septiembre del año pasado a 10,06 por ciento en enero (1,57 puntos más), y en el Banco Unión, de 9,98 a 12,49 por ciento (2,51 puntos) (ver infografía).

Los créditos hipotecarios en dólares también sufrieron alzas. El Banco Económico cobraba el año pasado 9,34 por ciento y en enero su tasa de interés fue de 12,09 por ciento (2,75 puntos más). En el Mercantil Santa Cruz el interés subió de 7,55 a 9,92 por ciento (2,37 por ciento más).

La Mutual La Primera subió de 7,27 a 8,45 por ciento, es decir, 1,18 puntos.

El financiamiento tanto en moneda extranjera como nacional para créditos comerciales e hipotecarios se encareció.

De acuerdo con los datos del BCB, la tasa de interés más alta (comercial) en bolivianos es cobrada por el Banco de Crédito: 19,92 por ciento en enero (11 puntos más que la tasa de 8,90 por ciento de septiembre de 2008).

Más exigencias

Asoban anticipó que el costo del crédito podría encarecerse más debido a la exigencia de la reguladora de subir las previsiones en moneda nacional y extranjera en la categoría A.

Así lo revela la circular Sb/604/2008, que hace referencia a modificaciones al anexo “Evaluación de la calificación de la cartera de créditos de las directrices generales para la gestión del riesgo de crédito”, que tiene el objetivo de preparar al sistema contra los efectos de la crisis externa.

Esta norma, según el secretario ejecutivo de Asoban, Marcelo Montero, obliga a los bancos a aumentar la previsión específica de la categoría A de 1 a 2,5 por ciento en moneda extranjera y en 1 por ciento en moneda nacional. Los créditos más solventes y que no tropiezan con dificultades en el pago de intereses y capital de parte de los prestatarios corresponden a la categoría A.

De acuerdo con Montero, esta obligación adicional puede impactar en un alza de las tasas de interés del sistema. “Toda previsión, en el fondo, es un gasto y afecta los costos, todo depende de la magnitud de las previsiones que se tenga que hacer para que impacte en el costo del crédito”. El ejecutivo de Asoban explicó que, si bien esta norma prepara al sistema para afrontar la crisis, lo que preocupa a los bancos es que se la tenga que aplicar con carácter específico.

“Deberían haberse implementado con carácter genérico, porque el propio manual de cuentas de la Superintendencia de Bancos señala que este tipo de obligaciones se exige para enfrentar crisis que aún no han llegado al país”.

Adicionalmente, la Superintendencia obligó a las entidades financieras a constituir el 25,02 por ciento de previsiones cíclicas (efectuar reservas en época de crecimiento económico para tiempos de desaceleración) hasta el 31 de diciembre de 2008 en forma acelerada. Montero indicó que la banca tuvo que colocar aproximadamente 30 millones de dólares para cumplir con la normativa contra los resultados de la gestión pasada.

El presidente de Asoban, Pablo Bedoya, agregó que este tipo de reservas se aplica en función de la calidad de cartera de cada entidad. Deben implementarse en un plazo de tres años y para el sector representará, dijo, un costo aproximado de 70 millones de dólares.

De acuerdo con Asoban, hasta diciembre de 2008 la cartera ascendía a 3.305 millones de dólares y la mora a 176 millones (cuatro millones menos que en la gestión 2007).

Las condiciones de acceso al crédito empeorarán

El crecimiento en la inversión del sector productivo sentirá los efectos en una disminución por el alza en las tasas de interés de los créditos que ofrece el sector bancario y la previsión que le obliga a tomar la Superintendencia de Bancos, de acuerdo con dos analistas y la representación nacional de los empresarios.

Según el ex ministro de Hacienda Waldo Gutiérrez, el encarecimiento del crédito se debe principalmente a la inflación, que llegó a un elevado índice y obliga a la banca a proteger los créditos que otorga.

En opinión del economista Alberto Bonadona, quien coincide con Gutiérrez, el alza permite ver un primer efecto de la crisis financiera internacional que afectó a Estados Unidos y tuvo sus repercusiones en otros países.

El presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Gabriel Dabdoub, dijo que el aumento de las previsiones a las que está obligada ahora la banca afectará al crecimiento del sector productivo porque éste tendrá dificultades para acceder al crédito. “Esta medida desincentiva las inversiones. Nosotros creemos que es un menor incentivo a la industria a pesar del pedido que le hemos hecho al Gobierno”.

Bonadona explicó que todos los rubros que utilizan el crédito van a ver que sus costos financieros se elevan por los intereses que tendrán que pagar. “Parecería ser una medida de prudencia, pero algo exagerada porque lo que tiene que hacerse en este momento es favorecer la inversión y no restringirla”.

Gutiérrez agregó que la norma inmovilizará los recursos puesto que la banca debe asumir el costo de una medida prudencial que le obliga a tomar la reguladora, pero este incremento se lo pasa al consumidor. El efecto, advirtió, será la disminución de la solicitud de créditos y limitará el crecimiento de las empresas.

La reguladora teme crisis

La Superintendencia de Bancos advierte que la crisis financiera internacional puede generar un entorno adverso para la economía boliviana en los próximos meses.

En la resolución Sb No 0267/2008, del 24 de diciembre, señala que “la situación financiera del entorno económico mundial hace vislumbrar que la economía podría verse negativamente afectada y consecuentemente las actividades de intermediación financiera, situación que podría generar un incremento de los niveles de exposición al riesgo crediticio”.

Esta resolución aprueba las modificaciones al anexo I “Evaluación y calificación de cartera de créditos”, que obligan a la banca a efectuar previsiones adicionales. Para la reguladora, la cartera de créditos es el principal activo de las entidades y, ante el aumento del riesgo, se hace imprescindible mejorar los niveles de reserva de previsiones para cubrir y minimizar los riesgos originados por potenciales pérdidas ocasionadas por el incumplimiento de obligaciones de los clientes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario