La medida de apreciar el boliviano para frenar la inflación externa, estaría generando mayor importación de alimentos, aumentando los precios de la producción nacional entre otros factores negativos.
En criterio de analistas económicos, la meta inflacionaria de 6% fácilmente podría ser rebasada por más de un 10% debido a la tendencia inflacionaria que se registra en los altos precios de alimentos, tarifas y otros productos, que en un futuro podría ser peligrosa dado a que las medidas gubernamentales causarían mayor inflación.
La economía del país volvió a registrar índices inflacionarios registrados hace más de dos años en el país (2007-2008), aunque el Gobierno y el Banco Central de Bolivia hayan modificado la meta inflacionaria de 4 a 6%, esto sería rebasado.
El problema que pretende ser superado con medidas anti-inflacionarias, como la apreciación de la moneda nacional frente al dólar, serían equivocadas, según el analista económico Julio Alvarado.
COMPONENTES PARA LA INFLACIÓN
Según Alvarado, existen dos componentes para la inflación. Una de ellas es la inflación importada que se da a través de los precios altos en el exterior.
El otro y el más serio, es la inflación interna que está asociada a los cambios climatológicos y las medidas económicas asumidas desde el Ejecutivo.
El analista económico, sostuvo, en cuanto a las medidas del Gobierno, que la restricción a las exportaciones ocasiona que los alimentos desaparezcan o se encarezcan en los mercados de abasto del país, provocando de esta manera un proceso inflacionario.
“Solamente el hecho de que el precio del azúcar se haya fijado por el Gobierno a Bs 7,50 y en tanto que los comerciantes anunciaron que iban a comercializar a Bs 6, significa que las medidas gubernamentales están fomentando la inflación”, sostuvo.
APRECIACIÓN DE LA MONEDA
La medida de apreciar el boliviano para frenar la inflación externa, estaría generando mayor importación de alimentos, aumentando los precios de la producción nacional entre otros factores negativos.
“Esa medida (apreciación) es un bumerán, porque si bien en el tema monetario ayuda a dar valor al boliviano y de la misma forma deberíamos tener menos presión del dólar, pero una apreciación del boliviano hace que la producción nacional se encarezca frente a la producción extranjera”, enfatizó.
En este sentido, fomentar la importación significa promover la importación de inflación.
“O sea estamos destruyendo fuentes de empleo, trabajo en Bolivia con la apreciación del boliviano y estamos incrementando los precios aún más- porque- tiene un doble efecto”, precisó.
SOLUCIÓN
Tomando en cuenta el resultado final de la apreciación de la moneda que impulsa la inflación, es necesario tomar otras medidas que ayuden a salir de este proceso inflacionario, como el apoyo a la producción agrícola y adquisición de maquinarias para generar mayor oferta.
“En necesario generar mayor producción para salir de esta crisis. Pero si sólo seguimos con medidas neoliberales aplicando políticas monetarias eso afecta naturalmente a la producción”, remarcó.
INFLACIÓN REBASADA
Hace más de dos semanas el Gobierno y el BCB cambiaron el pronóstico de 4% de inflación fijado para el 2011 a 6%.
Aunque en opinión de analistas económicos y amas de casa, la responsabilidad por el alza de precios de alimentos es del Ejecutivo por el desajuste que provocó con el “gasolinazo” de diciembre pasado.
Para el Gobierno, las razones para la modificación obedecen a la inflación y la crisis de alimentos que se vive en el ámbito internacional.
Paralelamente a lo que establece el Ejecutivo, algunos productos de la canasta familiar continúan elevados y otros reducen el costo paulatinamente, a esto se suma el alza de tarifas del transporte que tiene mayor incidencia en el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Para Alvarado, el incremento en el transporte tiene un efecto entre 2% a 3% de inflación.
“Sólo este aumento de 30 centavos en el transporte de Santa Cruz, significa un aumento de 20% del componente transporte y eso tiene un efecto multiplicador muy grande, por lo tanto el 6% que planteó el Gobierno para el 2011 no es realista y no refleja la realidad”, subrayó.
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