En los últimos siete años, la deuda pública total de Bolivia se incrementó en 79,5%; el Gobierno aseguró que el país tiene mayor capacidad de endeudamiento.
De acuerdo con los datos del Boletín de Estadísticas de Deuda Pública del Tesoro General de la Nación (TGN) 2013, en 2006 la deuda pública, que es la suma de las deudas interna y externa, era de 5.960 millones de dólares, mientras que en 2013 subió a 10.698 millones de dólares (ver infografía).
"El país es una de las economías con mejor capacidad de endeudamiento (que) hay en el mundo y en la región, de manera que si nosotros quisiéramos endeudarnos más lo podemos hacer”, enfatizó ayer el viceministro del Tesoro, Edwin Rojas, en una entrevista con la emisora estatal Patria Nueva.
La deuda externa subió de 3.285 millones de dólares a 5.262 millones de dólares entre 2006 y 2013, en tanto que la deuda interna, en ese mismo periodo, ascendió de 2.676 millones de dólares a 5.436 millones de dólares.
Sostenibilidad
Según el documento del Ministerio de Economía, en 2006 la deuda pública total representaba un 51,5% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que en 2013 llegó a un 34,7%.
Esto implica que las obligaciones del país están por debajo de los umbrales establecidos en el ámbito global (Tratado de Maastricht, 60%; Comunidad Andina de Naciones, 50% y Mercosur, 40%).
"Por lo que aún existe una amplia capacidad de endeudamiento”, puntualiza el Ministerio de Economía en su análisis.
La deuda externa , hasta 2013, llegaba a un 17,1% del PIB y la deuda interna a un 17,6%.
"En 2005, el PIB estaba en el orden de los 9.000 millones de dólares y el peso de la deuda era el 80%. En 2013, el PIB cerró en más de 31.000 millones de dólares, es decir, hemos crecido más de tres veces y la deuda llega al 33%. Claramente hubo una mejora en la capacidad de endeudamiento del país”, remarcó la autoridad.
Información desagregada
Los datos desagregados revelan que las obligaciones del Banco Central de Bolivia crecieron de 323 millones de dólares en 2006 a 2.638 millones de dólares en 2013.
En su análisis, el Ministerio de Economía señala que en 2013 esto se explica por la dinámica de la política monetaria aplicada por la entidad mediante las operaciones de mercado abierto o colocación de títulos-valores públicos, como letras o bonos, entre los usuarios.
Esto tenía como propósito mantener la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda.
La deuda del Tesoro General de la Nación se elevó en el período de análisis de 4.840 millones de dólares en 2006 a 7.301 millones de dólares, mientras que las obligaciones de YPFB, municipios y gobernaciones disminuyeron de 798 millones de dólares a 758 millones de dólares.
Rojas destacó que los recursos que pide prestado el país se destinan a transportes, energía, agua potable y saneamiento. Mencionó, como ejemplo, la integración vial mediante la construcción de dobles vías que unirán los departamentos de La Paz, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz, entre otros proyectos productivos.
Si hay déficit,se recurrirá al TGN o a mayor deuda interna
En caso de que este año las finanzas públicas registren un déficit fiscal -mayores gastos que ingresos-, el Gobierno no descarta recurrir a la deuda pública interna o a recursos del Tesoro General de la Nación (TGN) para financiar la brecha.
El viceministro del Tesoro, Edwin Rojas, aseguró que se hará todo lo posible para alcanzar un superávit. Dijo que a agosto, este indicador es de 2,8%.
"Se están tomando las previsiones correspondientes; a agosto tenemos un resultado fiscal positivo (superávit) a lo largo de todos estos meses y se harán todos los esfuerzos para que cerremos con equilibrio hasta fin de año. Si es que lo viéramos necesario, nos endeudaremos o bien vamos a enfrentar estas contingencias con los recursos que genera el TGN”, explicó.
En agosto, el ministro de Economía, Luis Arce, dijo que los gastos por las inundaciones en Beni y la organización de la cumbre del G77+China, en Santa Cruz, impedirán alcanzar por noveno año consecutivo un superávit fiscal. En 2013, el superávit llegó a 0,7%.
Según Rojas, sólo para la rehabilitación de la región beniana afectada por las inundaciones se destinaron 500 millones de dólares, un gasto no previsto en esta gestión, y que puede forzar a que registre una posición alejada de lo estimado, en cuanto a gasto fiscal, a principios de año.
En la organización de la cumbre del G77+China, el Gobierno gastó 115 millones de bolivianos (unos 16,5 millones de dólares).
Para que no haya una brecha entre los gastos e ingresos, que puede derivar en un déficit, el Gobierno instruyó a la Aduana y al Servicio de Impuestos Nacionales una mayor eficiencia en las recaudaciones.
Desde 2006, las finanzas registraron superávits.
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