Con el dólar paralelo, a un precio que supera los Bs 15 desde hace más de una semana, las compras de bienes y servicios en el exterior se tornan cuesta arriba y los bolivianos quedan, cada día que pasa, más aislados del mundo en materia financiera.
Y, a pesar de mantenerse en vigencia la Resolución 216/2025 de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), que establece que las compras en línea, pagos en POS físicos y retiros en cajeros automáticos para montos superiores a $us 100, pagarán una comisión en base a una fórmula con un componente fijo y uno variable -promedio del dólar paralelo de los últimos 30 días-, la situación no ha mejorado.
EL DEBER verificó que en cuatro bancos del sistema financiero nacional, las restricciones para compras en dólares con tarjetas de crédito continúan en crecimiento, incluso en uno de ellos, que en febrero tenía el límite de $us 1.000, en marzo bajó a 100 y en abril subió a 300. Otro banco, también en abril, rebajó las compras de $us 1.474 a solo $us 1.000.
Un director de la ‘Asociación de Padres con hijos que estudian en el extranjero’, comentó que tiene una hija que estudia en Alemania y que cada vez se hace más difícil enviarle dólares para su manutención. “Hoy, con el dólar a 15 bolivianos, cuesta el doble mantenerla”, dijo el padre de familia, quien pidió identificarse solo con las iniciales MAP.
Relató que, justamente, dicha asociación nació hace poco para buscar soluciones para el envío de remesas a jóvenes universitarios bolivianos -principalmente- que estudian en países de Latinoamérica, Europa y Estados Unidos, debido a las dificultades que se iniciaron con la ‘crisis cambiaria’ en 2023.
“Una señora creó un grupo de Whatsapp con padres que tienen hijos en Francia y rápidamente el grupo llegó a mil miembros y se saturó. Entonces creamos grupos por capítulos de cada país y hemos hecho gestiones ante algunos bancos y el Banco Central (BCB), pero no te brindan una alternativa más allá del negocio que significa para ellos”, dijo MAP.
Comentó que para enviar dinero a su hija compra dólares de a poco hasta llegar a un monto y luego busca amigos o personas que viajan al extranjero para que realicen el depósito en algún banco. “Ahora están las criptos (criptomonedas), que es más fácil, pero te pueden engañar (...). Ahora está el B2B (business to business) de Binance o las plataformas de los exchange, donde tú puedes acceder a un mercado más o menos regulado, que es un desahogo para muchísima gente. Yo compro ahí de 20 a 300 dólares”, detalló el padre de familia.
En ese camino, MAP fue descubriendo también otras alternativas para hacer llegar los recursos a su hija, como los llamados ‘neobancos’, que operan únicamente en línea, ofreciendo servicios a través de aplicaciones móviles y sitios web. Uno de ellos es Revolut y otro es Payoneer, que cuentan con gran versatilidad por contar con tarjetas de crédito electrónicas e, incluso físicas.
“Y me acabo de enterar, hace unos días que estaba en un aeropuerto, vi a un gringo que tenía en su celular la opción NFC (Comunicación de Campo Cercano) que habilita tu tarjeta virtual y se hace el pago como en POS. Entonces, vas descubriendo pequeñas cositas que generan menos ansiedad”, detalló.
‘Viajeros parias’
El presidente de la Cámara Boliviana de Turismo (Cobotur), Luis Ampuero, confirmó que los bancos no solo han bajado los límites para comprar en dólares con sus tarjetas en el exterior, sino que la moneda boliviana cada vez vale menos y se han perdido las posibilidades de usar las líneas de crédito de los clientes que viajan ya sea por cuestiones de negocios, salud, asistir a un congreso o, simplemente, de turista.
“Quien no tenía una línea de dinero (en dólares) en el extranjero está muerto. Lamentablemente, si tienes una cuenta en dólares en Bolivia, ahí se aplica el cepo cambiario y simplemente perdiste tu dinero. Si no tienes una tarjeta de crédito de otro país, tu tarjeta nacional es un hazmerreír, por más que tengas mucho dinero ahorrado en dólares en una cuenta boliviana”, lamentó Ampuero.
Al mismo tiempo, señaló que para el boliviano, el viajar al exterior “se ha dificultado tremendamente. En ese sentido, todos somos más pobres”, expresó.
Por su parte, un reconocido empresario que prefirió guardar su nombre en reserva, afirmó que, a pesar de contar con cuatro tarjetas de crédito de distintos bancos bolivianos, el estar limitado para compras por un promedio de $us 300 mensual, no solo es una incomodidad, sino enfrentar todo un reto.
“Viajes al exterior, las reservas de hotel, la compra de pasajes tienen que estar bien planificadas y con mucha antelación. Sirve también llevar efectivo que, aunque es aceptado, no es bien visto pagar en el exterior, especialmente montos grandes. Los bolivianos somos unos ‘viajeros parias’ excluidos de la modernidad, con la vergüenza de estar probando dos o tres tarjetas y rezando a ver si esta vez pasa”, relató.
Recomendó que todo usuario de una tarjeta de crédito debe conocer el tarifario de su banco, que es un boletín informativo que las entidades financieras tienen que publicar. “Ahí realizan las modificaciones de las condiciones de los servicios que prestan, valor de comisiones, límites, costos de mantenimiento, etc. Es requisito obligatorio de la ASFI, ya que los cambios que realicen se ponen en vigencia a partir de la publicación de estos tarifarios, en la página web de cada banco, al final, se encuentra un enlace para el tarifario” aclaró.
10 reclamos
Desde la ASFI, en un cuestionario respondido a EL DEBER, se informó que, de acuerdo a la información contenida en la Central de Reclamos y Sanciones de la entidad, se ha recibido 10 reclamos en segunda instancia relacionados con los límites de compras con tarjetas de crédito en el exterior.
De esos reclamos, dos fueron resueltos a favor del consumidor financiero y los restantes se encuentran en proceso de atención, en el marco de lo establecido en el Reglamento de Protección al Consumidor Financiero.
“La normativa emitida por ASFI no contempla restricción alguna para compras o retiros en dólares estadounidenses en POS, ni en cajeros automáticos en el exterior, siendo las Entidades Financieras (EF) quienes, en el marco de sus políticas y procedimientos, ante la demanda inusual de dólares estadounidenses (USD), acrecentada por la especulación efectuada por determinados sectores económicos y por el desmedido e inusitado incremento de transacciones realizadas con el exterior, se han visto en la necesidad de asumir diversas acciones adecuando sus controles, en función a los estándares internacionales definidos por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI)”, resaltó el organismo regulador.
Sin embargo -agregó- en procura de precautelar que dichas Entidades Financieras, aseguren la continuidad de los servicios financieros ofrecidos, que sean requeridos por los consumidores financieros, ya sea en moneda nacional o en moneda extranjera, ASFI determinó una obligación para el efecto, en el Reglamento de Protección del Consumidor de Servicios Financieros, estando las EF sujetas al inicio del procedimiento sancionatorio correspondiente, en caso de incumplimiento.
“Asimismo, es pertinente señalar que, este Órgano de Regulación dispuso en el Reglamento de Tasas de Interés, Comisiones y Tarifas, que las transacciones con el exterior, las cuales incluyen a las compras por internet, pagos por POS físicos y retiros en cajeros automáticos, realizadas hasta USD100 o su equivalente en otra moneda extranjera, durante un mismo mes, gocen de gratuidad, medida que, en promedio, beneficia al 82% de la población que utiliza estos servicios, hasta el señalado monto, estando las Entidades de Intermediación Financiera imposibilitadas de establecer límites inferiores a dicho importe, independientemente del tipo de transacción”, indicó la ASFI.
Para Saber
Crisis cambiaria. La crisis de los dólares o ‘crisis cambiaria’ se inició en febrero de 2023, cuando los usuarios de servicios financieros empezaron a reclamar a los bancos, porque no podían retirar sus ahorros depositados en la divisa estadounidense.
Negación. El Gobierno, hasta ahora, niega que la crisis se deba al mal manejo de la economía y al elevado gasto público. Reconoce, sin embargo, que la principal fuente de divisas, la exportación de gas natural, declinó por falta de inversión en el área de la exploración petrolera.
Restricciones. El Gobierno, a través de sus entidades reguladoras y el ente emisor, sostienen una política que trata de evitar la fuga de divisas, imporniendo restricciones, incluso con pagos a través de billeteras digitales como PayPal. Los viajeros y personas que envían remesas al exterior buscan modos con activos virtuales y ‘neobancos’.