Según el informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Índice de Precios al Consumidor (IPC), el termómetro que mide la inflación, en mayo registró una variación negativa de 0,18% respecto a abril, que fue 0,43% y en lo que va del año hay un acumulado de 0,82%, cuando en 2008 en el mismo periodo la inflación llegó 7,49%.
El Ministerio de Economía y Finanzas señaló que estos datos indican que la inflación está controlada y que la política monetaria y cambiaria llevadas adelante por el Banco Central de Bolivia fueron las adecuadas.
Según el INE, la papa, el arroz, la carne de res con hueso, el sábalo y la naranja son los alimentos que presentaron una baja en sus precios y tuvieron una baja incidencia en el IPC. Por su lado, el queso criollo, la carne de pollo (entero), el tomate, y la haba se encarecieron, al igual que el servicio de empleada doméstica.
Sobre el tema, el presidente del Colegio de Economistas de Bolivia, Waldo López, sostuvo que la baja inflación no se siente en los sectores de menores ingresos debido a que el pan, la leche, la carne de res sin hueso, el pescado y el pollo, que son los principales productos de la canasta familiar no bajaron de precio.
“El impacto es menor en estos sectores debido a que gastan sus ingresos más en alimentos y no tanto en servicios. También se debe reconocer que para los otros sectores con mayor poder adquisitivo una menor inflación les permite recuperar el valor de sus ingresos”, dijo López.
Por su parte, el titular de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, Gabriel Dabdoub, indicó que estos datos son preocupantes, porque indican que el mercado interno se está contrayendo y eso va a repercutir en la producción.
“Hay una menor demanda, pues hay menos plata en el país. Cayeron las remesas y las exportaciones disminuyeron, todos eso puede afectar el nivel de empleo y es lo que el Gobierno debe evitar”, sostuvo Dabdoub.
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