El emisor Banco Central de Bolivia (BCB) subrayó ayer su compromiso de preservar el poder adquisitivo de la moneda nacional, el boliviano, luego de apreciarla o, lo que es lo mismo, depreciar el dólar en dos puntos.
"El BCB reitera su compromiso de preservar el poder adquisitivo de la moneda nacional para contribuir al desarrollo económico y social, empleando de manera oportuna los instrumentos de política a su disposición", señala una nota de prensa.
El emisor explicó que la baja de dos puntos del dólar, de 7.02 a 7.00 bolivianos, obedece a la necesidad de reducir presiones inflacionarias de origen externo en el país andino amazónico.
"La decisión obedece a la necesidad de reducir las presiones inflacionarias de origen externo", señala.
La baja del dólar representa, visto el reverso de la medida monetarista, la apreciación de 0,28 por ciento del boliviano, manteniéndose el diferencial de 10 centavos con respecto al tipo de cambio, en la compra.
El documento justifica que esta apreciación surge, porque los precios internacionales de las materias primas han aumentado de manera significativa desde 2009 y también al aumento reciente en los precios internacionales de alimentos.
Por otra parte, indica que la creciente disponibilidad de dólares a nivel global se ha reflejado en una mayor afluencia de capitales a la región, provocando la apreciación de las monedas de los países vecinos pese a los esfuerzos por contener la misma a través de intervenciones en sus mercados cambiarios.
Ambos fenómenos económicos, incremento de la inflación y apreciación en los países socios comerciales, implican una mayor influencia de origen externo para Bolivia, que se puede mitigar adecuadamente utilizando el tipo de cambio como instrumento, puesto que la apreciación cambiaria es una medida que contribuye a la disminución de la inflación de origen externo.
Asimismo, explica que la apreciación favorece a las actividades productivas, pues disminuye sus costos de producción tomando en cuenta que cerca del 80 por ciento de las importaciones del país corresponden a bienes de capital e insumos productivos.
El BCB asegura que esta medida no afecta a las exportaciones nacionales.
Más aún cuando el incremento de los precios internacionales de la mayor parte de los productos de exportación del país supera ampliamente a la apreciación.
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