FMI y BM: Economía boliviana crecerá 3,5% en 2016

Ante el panorama de bajas cotizaciones de los productos básicos, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial coincidieron en sus estimaciones de crecimiento y señalaron, por separado, que Bolivia crecerá 3,5 por ciento en 2016. El Gobierno consignó un incremento del 5.01 por ciento en el Presupuesto 2016.

BOLIVIA

La pasada gestión, el Banco proyectaba para la presente gestión el crecimiento económico de Bolivia en 3,8 por ciento, pero en su informe de enero 2016 estima una nueva cifra, en alineamiento con la del Fondo Monetario Internacional, que vaticinó también una expansión no mayor al 3,5 por ciento. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) calculó, en cambio, un crecimiento de 4,5 por ciento.

PROYECCIONES

Para los años 2017 y 2018, la cifra estimada para el país, por ambas instituciones, es aún más baja y se fijó en 3,4 por ciento. El dato está por debajo de las estimaciones del Gobierno, que en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social incorporó en promedio un crecimiento anual del 5,8 por ciento, en el siguiente quinquenio.

MATERIAS BÁSICAS

En su informe, el Banco Mundial señaló que Sudamérica es la principal exportadora de materias primas, y que los precios deprimidos de los comoditties (materias primas) incidió en el comportamiento económico de la zona.

DESARROLLO

Latinoamérica ya no es la misma de lo que era a principios del milenio. El auge de las materias primas fue el motor detrás de logros significativos con respecto al empleo, salarios y el nivel de pobreza en toda la región y terminó cambiando el panorama económico, dice el informe.

Una realidad sin duda promovida por el empuje de China. Pero tras más de una década de crecimiento, la marea ha cambiado para Latinoamérica y en 2016 se prevé que la región tendrá que adaptarse a una nueva realidad de bajo crecimiento. Entre otras razones, precisamente, por la desaceleración del gigante asiático.

NUEVAS REALIDADES

“Ajustarse a las nuevas realidades va a genera problemas sociales y quizás presiones hacia el aumento de la desigualdad de los ingresos laborales”, afirmó Augusto de la Torre, economista en jefe de América Latina y el Caribe del Banco Mundial. “Hay que pensar en sistemas de protección social para las familias más pobres, de manera que no desincentive el deseo de trabajar y la creación de empleo”, agregó.