Los depósitos en el sistema financiero nacional al primer semestre de este año totalizaron $us 7.704 millones, es decir 22% más que en similar período del año pasado, señala el Informe de Estabilidad Financiera del Banco Central de Bolivia (BCB).
“Los depósitos fueron la principal fuente de financiamiento de la cartera de créditos, que alcanzó $us 5.162 millones con un crecimiento anual de 12%”, señala el informe del instituto emisor.
El Banco Central indica que las entidades financieras “deben privilegiar su rol fundamental de intermediar recursos para otorgar crédito al sector privado”, tomando en cuenta el mayor crecimiento de las captaciones con relación a las colocaciones durante el primer semestre.
Para el BCB, “la actividad económica del país mostró una de las tasas de crecimiento más altas de la región y estuvo acompañada por superávit en la balanza de pagos, en las cuentas fiscales y un sistema financiero sólido”. De enero a junio, “la confianza del público en el sistema financiero se reflejó en mayores plazos para sus ahorros”, lo que permitió que las entidades financieras den préstamos a mayor plazo.
“El sistema financiero tuvo un desempeño favorable que se caracterizó por tasas de crecimiento positivas”, añade el informe.
“La buena capacidad del sistema financiero para enfrentar un riesgo de crédito se constituye en una oportunidad para que las entidades financieras expandan sus colocaciones e incursionen en nuevos segmentos de mercado, donde las necesidades de financiamiento aún no son atendidas”, agrega el BCB.
“Los depósitos fueron la principal fuente de financiamiento de la cartera de créditos, que alcanzó $us 5.162 millones con un crecimiento anual de 12%”, señala el informe del instituto emisor.
El Banco Central indica que las entidades financieras “deben privilegiar su rol fundamental de intermediar recursos para otorgar crédito al sector privado”, tomando en cuenta el mayor crecimiento de las captaciones con relación a las colocaciones durante el primer semestre.
Para el BCB, “la actividad económica del país mostró una de las tasas de crecimiento más altas de la región y estuvo acompañada por superávit en la balanza de pagos, en las cuentas fiscales y un sistema financiero sólido”. De enero a junio, “la confianza del público en el sistema financiero se reflejó en mayores plazos para sus ahorros”, lo que permitió que las entidades financieras den préstamos a mayor plazo.
“El sistema financiero tuvo un desempeño favorable que se caracterizó por tasas de crecimiento positivas”, añade el informe.
“La buena capacidad del sistema financiero para enfrentar un riesgo de crédito se constituye en una oportunidad para que las entidades financieras expandan sus colocaciones e incursionen en nuevos segmentos de mercado, donde las necesidades de financiamiento aún no son atendidas”, agrega el BCB.
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