26 septiembre 2017

Video BID mira al sector privado para financiamiento


Habitualmente, al pensar en el Banco Interamericano de Desarrollo se considera una entidad que financia proyectos en trabajo directo con los gobiernos. En Bolivia, el BID tiene una cartera de alrededor de 500 millones de dólares que se invierten principalmente en proyectos de infraestructura. Sin embargo, un brazo de este organismo multilateral es la Corporación Interamericana de Inversiones, que brinda servicios principalmente al sector empresarial, con el fin de que a partir de las iniciativas reciban recursos para generar desarrollo a partir del sector privado. El gerente general se llama James P. Scriven y estuvo un par de días en Bolivia, primero en La Paz y después en Santa Cruz. Se reunió con empresarios y cerró su primer viaje a este país visitando la mayor vitrina comercial de Bolivia, la Expocruz. EL DEBER dialogó con él en exclusiva para conocer sus impresiones, los proyectos privados que más le llamaron la atención como potenciales receptores de créditos y de servicios.

Cuéntenos ¿a qué se debe su visita a Bolvia?
Estoy por primera vez en Bolivia, en La Paz y Santa Cruz. Soy el gerente general de la Corporación Interamericana de Inversiones, que es el brazo privado del grupo BID. Vengo a promocionarnos como institución y básicamente a escuchar a los bolivianos y presentar al banco en este país.

Santa Cruz se percibe como el motor económico de Bolivia, ¿cuál ha sido la impresión que tuvo en sus reuniones con los empresarios de esta región?

Muy buena impresión. Creo que Santa Cruz es obviamente un motor, especialmente en ciertos sectores. Nosotros, al ser un banco de inversión, queremos dinamizar esa característica, especialmente en el sector de la agroindustria, agronegocios en general. Me llevo muchas oportunidades para contribuir al desarrollo boliviano.

¿Cómo funciona el Fondo de Inversiones? ¿Hay créditos otorgados al sector privado de Bolivia?
Sí, hay créditos otorgados. Alrededor de 28 millones de dólares en 18 proyectos. Eso es poco comparado con lo que deberíamos estar otorgando. Hace un año y medio, se reestructuró el sector privado del Grupo Bid porque tiene la intención de invertir más fuerte en los países miembros. Eso derivó en mi visita y en una expansión importante de la oficina en La Paz, a fin de invertir mucho. ¿Cómo interactuamos? De dos maneras. La primera con dinero. Al ser un banco prestamos recursos económicos para proyectos de inversión, pero también con asesoría técnica. Tenemos especialistas en diversos sectores donde trabajamos para volcar conocimientos y ayudar a las compañías a expandir sus planes.

¿Qué tipo de proyectos tienen mayores posibilidades de acceder a los servicios que ustedes prestan?
Somos muy fuertes en los sectores que tienen un impacto enorme sobre el desarrollo del país. Por ejemplo en el transporte: autovías, puertos, aeropuertos; sector energético, especialmente de energía renovable, sector de agroindustria, de microfinanzas. Son áreas dinamizadoras de la economía tanto en la producción de bienes como de servicios, que tienen alto impacto en el crecimiento y en la creación de empleo, que es lo que estamos buscando como banca de desarrollo.

¿Qué pasa con proyectos como la construcción de mejor infraestructura en Puerto Aguirre, para tener acceso al océano Atlántico, o inversiones en el puerto de Ilo. En ambos casos estamos hablando de mucho dinero, también eso es viable?

No nos asustan los grandes proyectos. Los que menciona son interesantes. Escuché mucho entre ayer y hoy al respecto. Son proyectos que estamos empezando a analizar. Hemos hecho proyectos pequeños de cinco o seis millones de dólares hasta proyectos grandes de 400 o 500 millones de dólares. No es una preocupación el tema de los montos, lo que sí nos interesa es buscar impacto en el desarrollo o sea que si para la población del país estos proyectos pueden dejar gran impacto, lo vamos a analizar.

¿El financiamiento también podría alcanzar a los pequeños o medianos empresarios?
No somos un banco minorista, por lo que no podríamos prestar a los individuos, sino a la banca para que sea la intermediaria. Pero en proyectos de cuatro o cinco millones, sí podemos hacerlo.
Un tema de debate en Bolivia es la competencia que empresas del Estado con sus similares del sector privado.
Somos una banca de desarrollo que principalmente financia al sector privado, pero también financiamos a empresas del Estado. El año pasado, de todas las transacciones realizadas, casi el 20% fue financiamiento a empresas del Estado, aunque en este caso buscamos que sean bien manejadas. Entonces, aunque el accionista sea el Gobierno, lo que pretendemos es que tengan superávit, que tengan buena gobernanza corporativa y en esos casos podrían ser sujeto de crédito nuestro.

Tomando en cuenta su experiencia, ¿a usted qué le parece que el sector estatal compita con el privado?
Yo estoy hace más de 20 años en la banca de desarrollo y he visto muchos modelos de interacción en los países. Nadie tiene la verdad absoluta, pero creo que los roles del Gobierno y del sector privado son muy importantes. Por eso, como grupo BID trabajamos con ambos sectores.

Creo que los grandes problemas de desarrollo de un país no los resuelven o los privados o los públicos únicamente, sino que debe haber una buena interacción entre ambos. Por eso, como grupo queremos tratar de ayudar.
Sí creo que el sector privado tiene un rol dinamizador. En América Latina, el 70 u 80% de los empleos están en manos del sector privado, la producción de los servicios y bienes son privados en un 80%, especialmente en las pequeñas y medianas empresas. Por eso, como grupo apostamos a esas iniciativas para lograr el crecimiento de la economía.

¿Y al sector privado cómo lo ve frente a los desafíos de aportar al desarrollo y frente a las críticas que hablan de que solo buscan enriquecerse?

Ese es un rol importante del grupo BID, ser un nexo entre el sector público y privado para que ambos se entiendan mejor cuál es su rol en la economía. Se puede pensar que los empresarios privados solo buscan retorno para la inversión, pero en estos 20 años yo he visto que no es el caso, he visto buenos clientes que buscan tener impacto en el desarrollo de los países, creando buenos productos, generando mejores servicios y más empleos.
En la región tenemos alrededor de 350 clientes y trabajamos para que tengan buen impacto en el desarrollo. No trabajamos con cualquiera, sino con quien tiene el fin, la visión y la misión de generar desarrollo.
Uno de los grandes temas de debate en Bolivia se refiere a que alrededor del 70% de la economía es informal, no tributa.

¿Cómo se puede transformar esta realidad?

Bolivia no es el único país, muchos otros en América Latina tienen esos niveles de informalidad. Ahí es donde el Grupo BID ayuda. En el sector público para que se pueda traer a la formalidad a las personas que trabajan en la informalidad, a través del sistema tributario. En el sector privado se trabaja para entender esta realidad. Hemos trabajado mucho con empresas microfinancieras. Bolivia es un líder en este ámbito y quien trabaja en esto es el sector informal, de manera que se ayude a que pasen al sector que tributa.

En este momento, usted dice que la Corporación Interamericana de Inversiones tiene una cartera de 28 millones de dólares en Bolivia. Es una cifra muy conservadora, ¿es complicado invertir en Bolivia?

No es consecuencia de que sea difícil invertir en Bolivia, creo que el hecho de que tengamos una cartera tan pequeña se debe más a nuestra inactividad en el país. Hemos invertido mucho por ejemplo en países como Paraguay donde ahora tenemos más de 400 millones de dólares, con lo que parte de mi visita es promover la institución y abrir canales para mejorar la inversión, así que esperamos aumentos significativos.

¿Tendrá que ver la regulación que hay en el país?
No me focalizaría en eso para decir que es por eso solamente. El tema es más nuestro. Lo que hemos hecho hace un año y medio ha sido lo siguiente. Tradicionalmente solo trabajábamos en pocos sectores energía, transporte o finanzas, pero ahora hemos ampliado el ámbito a agronegocios, turismo, agua, hospitales; hemos abierto los sectores, que son vitales para el desarrollo. Antes solo hacíamos préstamos en dólares, estamos explorando moneda local, estamos explorando garantías o hacernos accionistas de compañías. Finalmente, estábamos todos en Washington y no se puede hacer negocios desde tan lejos. Por eso estamos ampliado nuestras oficinas en La Paz, mucha más cercanía, más bolivianos trabajando con nosotros para entender mejor al país.

¿Es caro acceder a sus servicios?
No debería ser porque financiamos a tasas del mercado

¿Qué proyectos que le hubieran presentado ve con mayores posibilidades?
Me llevo oportunidades interesantes en transporte, hablamos de energía, agronegocios. Fueron muy interesantes conversaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario