06 febrero 2011

Analista observa al Gobierno en un callejón sin salida

Pacheco: La baja del dólar y el índice de precios irreal muestran que los recursos del Gobierno para controlar la economía se están agotando, afirma el economista de Milenio.

La apreciación del boliviano en relación con la moneda estadounidense y una baja inflación difundida por el Gobierno sólo muestran que éste está en un callejón sin salida porque no consigue los instrumentos para controlar el alza de precios en el mercado nacional.

La afirmación fue realizada por el director de la Fundación Milenio, Napoleón Pacheco, quien puso en duda el indicador inflacionario de enero que el Instituto Nacional de Estadística (INE) estimó en 1,29 por ciento. El dato no refleja la realidad, expresó.

“Los datos de la inflación y la apreciación del boliviano —manifestó— sólo revelan que el Gobierno está en un callejón sin salida tras la vía de controlar el aumento de precios”.

El anterior viernes, el Banco Central de Bolivia (BCB) apreció al boliviano por cuarta vez en relación con la moneda norteamericana, que bajó su cotización de 7,04 a 7,03 bolivianos para la venta y 6,93 bolivianos para la compra.

Pacheco dijo que la tasa de inflación de enero no es un dato que signifique que la inflación sea considerable. “Si eso fuera así, no habría necesidad de apreciar nuevamente el boliviano, como lo hicieron las autoridades”, comentó.

Anticipó que la baja de la moneda estadounidense y las importaciones gubernamentales de alimentos, a través de Insumos Bolivia, sin pagar aranceles y con ventas sin factura, está contribuyendo a una competencia desleal y provocando desincentivo a los productores.

Explicó que si la inflación real fuera la que mide el INE, no habría necesidad de apreciar el tipo de cambio para abaratar importaciones, porque una inflación de 1,29 por ciento no es una inflación que deteriore, fundamentalmente, el poder adquisitivo, y que está destrozando a la economía popular.

Mencionó que si el dato del aumento de precios fuera de dos dígitos en un sólo mes, se justificaría la baja, pero no es el caso. “La razón para que aprecien el tipo de cambio, es porque la inflación real es mayor al 1,29 por ciento al que calculó el INE”, afirmó.

En ese contexto, el analista afirmó que el alza de precios está en un proceso ascendente y que las autoridades del Gobierno no pueden controlar la situación. Debido a eso, nuevamente recurren a la apreciación cambiaria para moderar el aumento del costo de los productos, dijo.

Para Pacheco, lo que debería hacer el Ejecutivo es dejar que el mercado funcione, empezar a construir, de manera seria, una agenda económica y dejar de lado la imposición de una serie de medidas como la prohibición de las exportaciones, fijación de precios e importaciones directas sin el pago de aranceles.

Por ejemplo, la reciente decisión del Ministerio de Desarrollo Productivo de fijar un precio para el azúcar y así frenar la demanda del producto, no consiguió su objetivo.

Ayer, los almacenes de Emapa continuaron atendiendo a consumidores que formaron largas colas, cinco días después del ajuste de precios anunciada por el Gobierno.

El euro es más apreciado que el dólar

María Magda Quispe, una estilista, es una de muchas personas que cambiaron su preferencia del dólar por el euro, tras las sucesivas depreciaciones frente al boliviano. Relata que ahorra en esa moneda, aunque no existen cajas de ahorro en los bancos para este signo monetario.

“Yo compro el euro en cortes de cinco, de 10, hasta de 50 cada vez que puedo para ahorrar, aunque sea en mi casa. Me comentaron que el dólar ya no tendrá el mismo valor como hace dos años, cuando llegó a cotizarse en 8,08 bolivianos”, relató.

En ese sentido, afirmó que la clara muestra es que hoy se siga depreciando al dólar.

Por otro lado, comentó que otra de las consecuencias de la baja del dólar es que las personas que alquilan viviendas decidieron incrementar los costos del alquiler en moneda extranjera.

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