08 agosto 2008

IBCE sugiere 10 puntos esenciales para impulsar la economía nacional


El Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) sugiere al Gobierno redireccionar su política económica en base a diez puntos esenciales para el incremento de la producción, la atracción de inversiones externas, además de frenar la inflación y evitar el alza en los precios de los productos de la canasta familiar.

Entre esos puntos esenciales que se debería poner en ejecución se encuentran: impulsar una drástica mejora de la calidad de gestión pública, trabajar en la promoción externa, generar una verdadera inclusión social, no encandilarse con la renta del gas natural y tomar buenas decisiones en materia de integración.

Además se pide garantizar mercados para las agroexportaciones, consolidar el mercado de los Estados Unidos para la producción nacional, combatir el contrabando y recuperar el mercado interno, evitar hacer política a costa de la economía y privilegiar una agenda productiva por la competitividad.

Esas 10 propuestas del IBCE surgieron como resultado de la realización de más de 20 Foros de diálogo con la sociedad civil, llevados adelante desde el 2006, eventos en los que participó también el Poder Ejecutivo que tiene conocimiento de sus resultados.

El IBCE dice que “precios justos” (políticos); licencias previas, cupos y prohibiciones de exportación; además de subsidiar las importaciones de lo que podemos producir, no es justo ni inteligente, menos, responsable; por lo que pide al gobierno del presidente Evo Morales aplicar esos 10 principios.

La primera propuesta consiste en que se debe aplicar una agenda productiva, dejando de lado el tratamiento político, que logrará que los resultados de la macroeconomía redunden en más empleo y bienestar para la generalidad de todos los bolivianos.

“Se debe garantizar la seguridad jurídica y medidas de política económica para eliminar la incertidumbre que complota contra la actividad productiva y los empleos”, acotó.

En ese marco se pide no hacer política a costa de la economía nacional. Se debe impulsar relaciones virtuosas con todos los países, dejando de lado ideologías y políticas.

“Los 4.800 millones de dólares logrados por Bolivia en exportaciones en el 2007 –que pudieron ser mucho más con buenas políticas públicas- palidecen frente a las ventas por 27.000 millones de dólares de Perú, o los más de 65.000 millones de dólares logrados por Chile, países vecinos donde sus Gobiernos –más allá de la ideología, de derecha, centro o izquierda- extreman esfuerzos para desarrollar su potencial y crear empleos en una relación virtuosa con todos los países”.

Combatir el contrabando y recuperar el mercado interno es otro de los puntos esenciales que el Gobierno debe tomar en cuenta. El contrabando quita más de 200.000 fuentes de empleo a los bolivianos y más de 250 millones de dólares al Estado, por tributos no cobrados, lo cual tiene que ver también con el narcotráfico que está en su auge.

“Asimismo, con la permisividad para importar ropa usada (negocio de más de 40 millones de dólares anuales): el Gobierno tuvo la oportunidad de ser contundente en detener esta competencia ilegal y desleal que daña a la industria boliviana”, señaló.

Además se tiene que consolidar el mercado de los Estados Unidos para las manufacturas bolivianas y en ese marco, no sólo debe conformarse con ampliaciones periódicas de la Ley de Preferencias Arancelarias. “La recomendación más sensata sería sentarse a negociar un Acuerdo Comercial mutuamente satisfactorio para ambas partes”.

En ese marco también se deben garantizar los mercados para las agroexportaciones y tomar buenas decisiones en materia de integración comercial no sólo a nivel regional, sino también mundial.

Otro de los aspectos que recomienda es no encandilarse con los recursos de la renta del gas natural ni de los minerales, porque estos podrían faltar si el mercado internacional baja sus costos. Es necesario tener una política clara para enfrentar la época de las “vacas flacas”.

Finalmente, se tocan tres puntos de similar importancia, como impulsar la inclusión productiva en las medianas y grandes empresas para la generación de más empleo.

Ambos sectores privado y público deben concertar en impulsar la promoción externa y para ello se debe realizar una drástica mejora de la calidad de gestión pública, reflexiona.

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