Este año el costo en pensiones aumentará en 421,5 millones de bolivianos debido al crecimiento de los gastos que debe efectuar el Tesoro General de la Nación (TGN) en la compensación de cotizaciones a los jubilados que contribuyeron al antiguo sistema de reparto.
Datos del Presupuesto General de la Nación (PGN) revelan un incremento del 12,3 por ciento en el costo que representa el pago de rentas.
En 2007, el Estado tuvo que erogar un total de 3.510,8 millones de bolivianos para cubrir las prestaciones de la seguridad social y este año el monto subirá a 3.932,4 millones.
El viceministro de Pensiones, José Luis Pérez, explicó que este gasto fundamentalmente se debe a que el Estado debe garantizar las rentas por compensación de cotizaciones.
Las personas que se jubilan con este mecanismo reciben una parte de sus pensiones financiada por el Estado y otra de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), adonde contribuyeron durante los últimos años de vida laboral con el 12,5 por ciento de sus salarios.
La compensación es un reconocimiento que hace el Tesoro General de la Nación (TGN) a los trabajadores que aportaron para su jubilación al antiguo sistema de reparto, pero que deben seguir contribuyendo en el nuevo esquema manejado desde 1997 por las AFP.
Ese año ingresó en vigencia el sistema de capitalización individual, pero las personas que no se pudieron jubilar por falta de cotizaciones o no tenían la edad suficiente tuvieron que seguir trabajando y aportando.
Pérez explicó que en la actualidad los jubilados con Compensación de Cotizaciones llegan a 14 mil ciudadanos.
En 2007 se registró un incremento de seis mil personas y este año se espera que haya un ajuste similar.
El Estado debe responder por las rentas de 130 mil jubilados del antiguo esquema de reparto. Este número cada año tiende a reducirse por el fallecimiento de los beneficiarios.
El costo en pensiones para el TGN es inflexible porque no puede dejar de presupuestar un monto cada año para atender los requerimientos.
En gestiones pasadas este gasto fue una de las principales causas del déficit fiscal, pero con los procesos de depuración, fiscalización y mayores ingresos el Estado equilibró las necesidades financieras del TGN.
Para el analista Alberto Bonadona, el mayor pago de rentas contribuye a incrementar el gasto corriente del Gobierno.
Sostuvo que el costo en pensiones debería mostrar una tendencia a la disminución en lugar de aumentar.
En su criterio, el incremento en el presupuesto de este rubro en 2008 debe darse salvo el caso de que se hayan ajustado las rentas hacia el alza de los derechohabientes, es decir de la esposa e hijos de los jubilados fallecidos. En el caso de las cónyuges, hasta ahora sólo perciben el 80 por ciento de la renta del titular.
Además de pensiones, en 2008 el TGN tendrá otros gastos, como los sueldos que ascienden a 9.188 millones de bolivianos (47,7 por ciento de los egresos), la compra de bienes y servicios por 890 millones y los intereses de la deuda externa por 2.782 millones.
Estos egresos son financiados por el Tesoro. De acuerdo con el Gobierno, el aumento del gasto corriente obedece a que el Estado tiene una mayor participación ahora en las empresas estratégicas como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
El PGN 2008 entró en vigencia plena ayer, luego de ser aprobado sin la venia del Senado el 28 de diciembre de 2007. La Cámara Alta observó y modificó el proyecto enviado por Diputados.
Datos del Presupuesto General de la Nación (PGN) revelan un incremento del 12,3 por ciento en el costo que representa el pago de rentas.
En 2007, el Estado tuvo que erogar un total de 3.510,8 millones de bolivianos para cubrir las prestaciones de la seguridad social y este año el monto subirá a 3.932,4 millones.
El viceministro de Pensiones, José Luis Pérez, explicó que este gasto fundamentalmente se debe a que el Estado debe garantizar las rentas por compensación de cotizaciones.
Las personas que se jubilan con este mecanismo reciben una parte de sus pensiones financiada por el Estado y otra de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), adonde contribuyeron durante los últimos años de vida laboral con el 12,5 por ciento de sus salarios.
La compensación es un reconocimiento que hace el Tesoro General de la Nación (TGN) a los trabajadores que aportaron para su jubilación al antiguo sistema de reparto, pero que deben seguir contribuyendo en el nuevo esquema manejado desde 1997 por las AFP.
Ese año ingresó en vigencia el sistema de capitalización individual, pero las personas que no se pudieron jubilar por falta de cotizaciones o no tenían la edad suficiente tuvieron que seguir trabajando y aportando.
Pérez explicó que en la actualidad los jubilados con Compensación de Cotizaciones llegan a 14 mil ciudadanos.
En 2007 se registró un incremento de seis mil personas y este año se espera que haya un ajuste similar.
El Estado debe responder por las rentas de 130 mil jubilados del antiguo esquema de reparto. Este número cada año tiende a reducirse por el fallecimiento de los beneficiarios.
El costo en pensiones para el TGN es inflexible porque no puede dejar de presupuestar un monto cada año para atender los requerimientos.
En gestiones pasadas este gasto fue una de las principales causas del déficit fiscal, pero con los procesos de depuración, fiscalización y mayores ingresos el Estado equilibró las necesidades financieras del TGN.
Para el analista Alberto Bonadona, el mayor pago de rentas contribuye a incrementar el gasto corriente del Gobierno.
Sostuvo que el costo en pensiones debería mostrar una tendencia a la disminución en lugar de aumentar.
En su criterio, el incremento en el presupuesto de este rubro en 2008 debe darse salvo el caso de que se hayan ajustado las rentas hacia el alza de los derechohabientes, es decir de la esposa e hijos de los jubilados fallecidos. En el caso de las cónyuges, hasta ahora sólo perciben el 80 por ciento de la renta del titular.
Además de pensiones, en 2008 el TGN tendrá otros gastos, como los sueldos que ascienden a 9.188 millones de bolivianos (47,7 por ciento de los egresos), la compra de bienes y servicios por 890 millones y los intereses de la deuda externa por 2.782 millones.
Estos egresos son financiados por el Tesoro. De acuerdo con el Gobierno, el aumento del gasto corriente obedece a que el Estado tiene una mayor participación ahora en las empresas estratégicas como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
El PGN 2008 entró en vigencia plena ayer, luego de ser aprobado sin la venia del Senado el 28 de diciembre de 2007. La Cámara Alta observó y modificó el proyecto enviado por Diputados.
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