“El Banco Unión rompió ese paradigma de que lo estatal es malo”

Para la entidad, con mayoritaria participación accionaria del Estado, el mayor desafío de este año es la atención en el pago de sueldos a los funcionarios públicos y la administración de las cuentas fiscales.

A partir de hoy, una importante masa de trabajadores del sector público recibirá el pago de sus salarios en el Banco Unión, atención que representa el mayor desafío de la entidad estatal en 2011. Marcia Villarroel, gerente general del ente financiero, accedió a una entrevista con Cambio para hablar de los nuevos emprendimientos, conversación que reproducimos a continuación.

—¿Qué representa para el banco la incorporación de miles de clientes del sector estatal?

—El desafío del Banco Unión para este año es la atención a los funcionarios públicos y nuevas cuentas fiscales. En esta gestión vamos a trabajar en dos etapas, una primera que comienza este 4 de abril, cuando todos los funcionarios públicos que recibían sus salarios del Banco Mercantil pasan al Banco Unión. Estamos hablando de las ciudades de La Paz, El Alto y el departamento del Beni; nos referimos a más de 95 mil funcionarios.

Tenemos una segunda etapa que comienza el 1 de julio, cuando pasen todos los funcionarios públicos del Banco de Crédito al Banco Unión; estamos hablando de más de 100 mil funcionarios. En realidad vamos a terminar atendiendo a más de 400 mil funcionarios a nivel nacional y vamos a manejar más de cinco mil cuentas fiscales.

—¿Qué implica para la institución este crecimiento vegetativo de clientes y cuentas fiscales?

—Para el banco esto implica una nueva estrategia de comunicarse con sus clientes, significa que la gente que antes era atendida por los bancos de Crédito y Mercantil tiene que sentir un cambio positivo, un cambio en el servicio y para eso el Banco Unión ha trabajado hace varios meses remodelando y ampliando sus agencias.

Lo que queremos es demostrar que un banco que tiene participación accionaria estatal mayoritaria es una entidad eficiente. Ese paradigma de que lo estatal es malo, el banco ya lo rompió hace varios años, pero tiene que seguir mostrando que funciona mejor precisamente porque tiene un apoyo y también una exigencia del Estado.

—¿Qué novedades se presentarán con la ampliación de sus servicios?

—Este año vamos a abrir 30 nuevas agencias en La Paz. A partir de mañana (hoy) estamos abriendo cuatro megaagencias, una en El Alto, otra en San Miguel, otra en la plaza Isabel la Católica. También estamos tomando la agencia que usaba el Banco Mercantil para pagar a funcionarios públicos, el que está ubicado en el pasaje Núñez del Prado. Esto significa que con esas agencias, más las 10 que tenemos en La Paz y El Alto, vamos a tener 14 agencias a disposición de todos los funcionarios públicos. Esto hace ver que el Banco Unión está empezando a mostrar una imagen más moderna y sobre todo una imagen de comunicación directa con el cliente.

—¿Harán nuevas contrataciones para ampliar sus recursos humanos?

—Estamos contratando 500 funcionarios para el banco, sobre todo en la parte de cajas, plataformas, para que puedan brindar la calidad de atención que se merecen los funcionarios públicos.

Mucha gente se pregunta: ¿podrá el Banco Unión atender esta cantidad de gente? Creo que en los últimos años la institución ha dado muy buenos resultados porque hemos crecido en cartera, en productos, en servicios, entonces pienso que el banco está en la capacidad de dar un buen servicio y de atender a más público. Desde febrero hemos empezado a atender el pago de impuestos bajo el sistema Newton y a partir de abril comenzamos con la atención al resto de los contribuyentes.

—¿Cómo se piensa encarar las largas filas de trabajadores públicos que había en la agencia del Banco Mercantil?

—Tenemos dos estrategias; la primera es que atendemos en todas las agencias del banco, es decir que no hay agencias especializadas. El día lunes estaremos abriendo las 14 agencias (en La Paz y El Alto) para el pago a los funcionarios públicos y esto evitará congestionamientos.

Por otro lado, se ha comenzado una campaña de bancarización, es decir que hemos visitado los lugares de trabajo de los funcionarios públicos para afiliarlos en sus fuentes de trabajo, se les ha abierto sus cuentas y entregado sus tarjetas de débito. Hasta el momento tenemos más de 22 mil personas que tienen sus tarjetas, por lo tanto no tendrán que acudir a las agencias, sino irán a los cajeros automáticos y para eso el banco hizo una inversión muy grande porque hemos comprado 110 cajeros para todo el país. En La Paz tendremos 69 cajeros distribuidos en todas las zonas, incluida El Alto.

—¿A cuánto asciende la inversión para mejorar los servicios bancarios?

—Para la implementación de nuevos cajeros automáticos, más la apertura de agencias, la contratación de personal y remodelaciones, este año el Banco Unión está invirtiendo aproximadamente ocho millones de dólares. Eso se va a reflejar en una mejor atención, estamos capacitando a la gente porque se necesita que el personal no sólo sea eficiente, sino también amable y respetuoso.

—¿La ampliación de los servicios también alcanzará al sector rural?

—Abriremos agencias en San Ignacio, Portachuelo, Warnes, pero también estamos en Llallagua, Villazón, Monteagudo, Uyuni, Tupiza, Cotagaita, Atocha, Uncía, Challapata; en Tarija tenemos presencia en Yacuiba, en el norte del país tenemos servicios en Riberalta, San Borja, Reyes, creo que es el banco que más cobertura tiene en provincias a lo largo del territorio nacional.

—A partir de estos cambios, ¿a qué sector se orientará más el banco, en créditos, por ejemplo?

—El banco tiene opciones para todos los segmentos, desde microcréditos, pymes, crédito para cooperativas, vivienda, banca corporativa, pero de modo fundamental este año la entidad se dirigirá al sector productivo y sobre todo al de alimentos, que precisamente es donde el banco puede contribuir al desarrollo económico-social del país.

—¿A cuánto alcanza la cartera disponible para el sector productivo?

—El 30 por ciento de la cartera del banco se orienta al sector productivo. Si este año vamos a tener 100 millones de dólares, entonces estamos hablando de más de 30 millones que serán destinados a la producción. Actualmente manejamos 40 millones de dólares del BDP (Banco de Desarrollo Productivo) en créditos productivos y este año esperamos crecer más.

—¿Puede mencionar algunos indicadores que nos muestren el tamaño del banco?

—El año 2010 el banco cerró con una cartera (de crédito) de 403 millones de dólares, hemos cerrado con una mora del 4 por ciento, que en los últimos años hemos logrado bajar porque (no se debe olvidar que) es una mora heredada de hace 10 años.

En este momento la cartera colocada del banco tiene una mora de menos del uno por ciento (...), hemos tenido un crecimiento en la cartera de depósitos de 536 millones de dólares, hemos cerrado con un patrimonio de 51,7 millones; en los últimos cuatro años hemos duplicado el patrimonio.