16 abril 2012

Es Gerente General de Corresur, una empresa dedicada al corretaje de seguros desde hace tres años y medio

Es Gerente General de Corresur, una empresa dedicada al corretaje de seguros desde hace tres años y medio. Destaca la importancia de la fiscalización del sector que ahora regresó a la Autoridad de Pensiones y Seguros. Y sostiene que el mercado asegurador se ha triplicado y hay una mayor conciencia para proteger la vida y los bienes personales y empresariales; sin embargo, falta que varios  sectores económicos informales cuenten con información clara y ordenada para que puedan acceder a un programa de seguros.

— La autorización a Corresur fue otorgada por la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y ahora son fiscalizados por la Autoridad de Fiscalización y Control de Pensiones y Seguros (APS), ¿hay mucho cambio?

— Hasta marzo de 2012 dependíamos de la ASFI, que veía banca, valores y seguros, y volvimos a depender de la APS. Cuando dependíamos de la ASFI, consideramos que la fiscalización fue más flexible, si vale el término, porque estaba especializada en banca y no en seguros (NdR: antes era la Superintendencia de Pensiones, Valores y Seguros que regulaba y fiscalizaba a las empresas del sector seguros). Esta responsabilidad de fiscalización estuvo por un par de años a cargo de la ASFI.

— ¿Con qué requisitos se conforman este tipo de empresas?

— Tiene que ser una Sociedad de Responsabilidad Limitada o Sociedad Anónima, no puede ser una Empresa Unipersonal. Se necesita un capital mínimo de 17.250 Derechos Especiales de Giro (DEG) que más o menos equivalen a $us 30 mil. Otros requisitos son una póliza de responsabilidad civil profesional, una póliza de errores y omisiones para el buen funcionamiento de la empresa que se deposita en la APS y sirve como garantía. Hay otros requisitos que exige el Código de Comercio. Es imprescindible un plan de negocios que se pone a consideración de la APS y demostrar que conozcas o hayas trabajado en el mercado de seguros.

— ¿A qué se dedica Corresur en el mercado de seguros?

— Es una empresa de corretaje de seguros; es la intermediación entre clientes privados y las empresas de seguros. Nosotros hacemos un diseño de programa de seguros para el cliente, le damos las cotizaciones que podemos obtener en el mercado y la compañía de seguros adjudicada nos paga una comisión que está incluida dentro de la prima que paga el cliente. Generalmente tiene un año de duración y si ocurriese un siniestro en ese tiempo, nos hacemos cargo de todo el proceso hasta que se cobre la póliza.

— ¿Qué tipo de clientes atienden y a qué sectores pertenecen?

— Trabajamos con empresas privadas y embajadas. Hicimos consultorías para YPFB Transporte, Boliviana de Aviación BoA, Ministerio de Educación, Ministerio de Salud, EPSAS, y las aeronaves del Ministerio de la Presidencia.

— ¿En qué tipos de seguros?

— Todos. Pueden asegurarse desde un vehículo, aeronaves, empresas y fábricas de todo tipo. Trabajamos en seguros generales con las siete compañías que actualmente están en el mercado, y con las seis compañías especializadas en personas en casos de accidentes personales, seguros de salud o vida.

— ¿Cuántos siniestros han atendido en estos tres años?

— Varios y de diversas magnitudes. Uno, bastante complicado en su atención, fue el colapso de la tubería de la represa de Hampaturi, en 2008 (unos $us 350 mil). Otro es el incendio en la ex fábrica Said, del Cecolap, donde el Ministerio de Educación nos contrató exclusivamente para este siniestro en el que perdió unos $us 3 millones en bienes, tenía equipos de computación, telares, libretas y otros. Hace un par de semanas recibimos información de la aseguradora Fortaleza de que el siniestro está aceptado. También atendimos varios siniestros de aeronavegación.

— ¿Por qué es complicado aceptar seguros de siniestros?

— Toda póliza de seguros tiene derechos y obligaciones y hay que demostrar que el siniestro es pagable con toda la documentación que la compañía aseguradora exige para que nos den la aceptación del reclamo. Cuando ocurre el siniestro, el corredor de seguros tiene que estar al lado del cliente.

— ¿Con póliza pagada y al día?

— Si diseñas un programa adecuado de seguros, la probabilidad de un rechazo a un reclamo es mínima; se cobra porque la suspensión de la cobertura es automática según el Código de Comercio.

— ¿Y si el siniestro pasa el día que se debe pagar o al siguiente?

— Lo primero es que la póliza esté pagada y si tiene la cobertura todo va a ir bien. Las compañías analizan el comportamiento de pago del cliente. Estoy seguro que se podría considerar 1 o 2 días.

— ¿Se desarrolla la cultura del seguro en el país?

— Desde la implementación del Seguro Social Obligatorio y del SOAT (vehículos) se está creando mucha conciencia en la población boliviana, el mercado de seguros se ha triplicado en los últimos 12 años. Aún no es elevado. El mercado está alrededor de los $us 244 millones (datos de la APS a noviembre). Otros países de la región tienen un gasto mayor en seguros.

— ¿Qué se necesita para que el mercado se desarrolle más?¡

— En muchos casos hace falta formalizar muchos sectores de nuestra economía. Cuando se pide un inventario o estados financieros hay problemas para proteger patrimonios de la gente de la Eloy Salmón, Huyustus o pequeños talleres en El Alto. No tienen información para que las compañías diseñen productos adecuados.

Perfil

Nombre: Álex Haro Profesión: Economista Cargo: Gerente General de Corresur Experto en corretaje de segurosPaceño. Economista de la Universidad Mayor de San Andrés. Tiene un posgrado en Administración de Empresas de la Universidad Los Andes y una maestría en Gerencia y Riesgos en la Universidad Andina. Trabaja en el sector seguros hace 25 años. Empezó en Ciacruz, que hoy está fusionada a La Boliviana; siete años después en Seguros Illimani y de 2000 a 2006 en la Gerencia Comercial de Adriática. Luego se dedicó a conformar su empresa, dedicada al corretaje de seguros. Una charla, un día en Santa Cruz, dio paso a crear una sociedad con Marcelo Montalvo y luego con su hermana Marisol Haro. Recibieron la autorización de funcionamiento en septiembre de 2008.

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