La política monetaria del Banco Central de Bolivia (BCB) tiene como una de sus tácticas, para frenar el índice inflacionario, la gradual pero constante devaluación del dólar. Sin embargo, de acuerdo con los analistas consultados, esta medida no logró su objetivo, pues la inflación acumulada en este primer semestre es del 8,85% mientras que en ese periodo la moneda estadounidense se devaluó en 45 centavos.
Los analistas coincidieron en que esta medida va en contra de los ahorristas y de los exportadores que ven perder su poder adquisitivo cada vez que el dólar se devalúa en uno o dos puntos.
En palabras del experto Bernard Inch, el Gobierno se equivoca en insistir con la devaluación del dólar, pues ésta no es la solución para frenar la inflación. “Devaluar el dólar es el instrumento más ineficaz y es el que está creando más problemas. Se debe apuntar a las operaciones de mercado abierto (se retira circulante a cambio de papeles del Tesoro General) y a reducir el gasto fiscal”, manifestó.
Por su parte, Napoleón Pacheco, de la Fundación Milenio, observó que para que tengan algún efecto positivo las medidas del BCB deben estar coordinadas con la política fiscal del Gobierno, pues mientras el BCB busca reducir la inflación, el Poder Ejecutivo aumenta el gasto fiscal y provoca una mayor cantidad de dinero en efectivo en el mercado.
A su vez, el BCB remarcó que la devaluación del dólar no sólo se realiza en el país, sino que esta política monetaria, debido a la situación económica de EEUU, se repite en otras naciones.
Sobre el excesivo gasto fiscal, el Ministerio de Planificación del Desarrollo, aseguró que no hay tal y reiteró que la devaluación del dólar en Bolivia es apenas del 4%, mientras que en Argentina es del 11%.
Para el analista Gonzalo Chávez, la clave para tener controlada la inflación es que el Gobierno frene el incremento de los alimentos y que no sólo apunte a medidas de corto plazo, como es el tipo de cambio.
Reacciones
Rubén Ardaya - Tarija
La devaluación del dólar no sólo no frena a la inflación, sino que está generando al BCB una pérdida de más Bs 2.000 millones (para sacar los dólares del mercado). Otro efecto negativo es la pérdida de competitividad de los exportadores que cada vez que cambian los dólares a bolivianos pierden poder de compra.
Los analistas coincidieron en que esta medida va en contra de los ahorristas y de los exportadores que ven perder su poder adquisitivo cada vez que el dólar se devalúa en uno o dos puntos.
En palabras del experto Bernard Inch, el Gobierno se equivoca en insistir con la devaluación del dólar, pues ésta no es la solución para frenar la inflación. “Devaluar el dólar es el instrumento más ineficaz y es el que está creando más problemas. Se debe apuntar a las operaciones de mercado abierto (se retira circulante a cambio de papeles del Tesoro General) y a reducir el gasto fiscal”, manifestó.
Por su parte, Napoleón Pacheco, de la Fundación Milenio, observó que para que tengan algún efecto positivo las medidas del BCB deben estar coordinadas con la política fiscal del Gobierno, pues mientras el BCB busca reducir la inflación, el Poder Ejecutivo aumenta el gasto fiscal y provoca una mayor cantidad de dinero en efectivo en el mercado.
A su vez, el BCB remarcó que la devaluación del dólar no sólo se realiza en el país, sino que esta política monetaria, debido a la situación económica de EEUU, se repite en otras naciones.
Sobre el excesivo gasto fiscal, el Ministerio de Planificación del Desarrollo, aseguró que no hay tal y reiteró que la devaluación del dólar en Bolivia es apenas del 4%, mientras que en Argentina es del 11%.
Para el analista Gonzalo Chávez, la clave para tener controlada la inflación es que el Gobierno frene el incremento de los alimentos y que no sólo apunte a medidas de corto plazo, como es el tipo de cambio.
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Rubén Ardaya - Tarija
La devaluación del dólar no sólo no frena a la inflación, sino que está generando al BCB una pérdida de más Bs 2.000 millones (para sacar los dólares del mercado). Otro efecto negativo es la pérdida de competitividad de los exportadores que cada vez que cambian los dólares a bolivianos pierden poder de compra.
Graciela Toro- Min. de Planif.
Considero que lentamente la inflación está siendo controlada. No debe haber discursos de alarma, de este fenómeno mundial. Debemos trabajar más en los controles financieros y en dar una respuesta a la demanda de los alimentos. Estimo que la inflación en 2008 no será superior al 10%, muy por debajo a lo señalado por los expertos.
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