A pesar de la tendencia mundial de apreciar nuevamente al dólar, en el país la divisa estadounidense continuará devaluándose respecto a la moneda nacional, en aproximadamente cincuenta centavos más, hasta fin de año, y llegará a 6,5 bolivianos por cada dólar. Así lo anunció ayer la ministra de Planificación del Desarrollo, Graciela Toro.
“El dólar va a llegar (a bajar) máximo, de 6,99 (cotización actual para la compra) a 6,5 (bolivianos), es todo lo que se va a hacer hasta fin de año”, sostuvo la autoridad del Poder Ejecutivo al ser consultada sobre el comportamiento que tendrá esta moneda.
La divisa estadounidense viene recuperándose respecto a las monedas de otros países del mundo, como el euro, el yen y la libra esterlina, entre otros, debido al enfriamiento de la economía europea; a la reducción de la demanda en China e India; al estancamiento económico en Estados Unidos; a la caída de los precios de los comodities (petróleo y minerales) y a la elevada inflación en los países de la región.
La información del Gobierno le cayó como “una bomba” al sector empresarial, principalmente a los exportadores, quienes piensan que esta situación los pondrá al borde de la quiebra, con efectos directos en la generación de fuentes de trabajo.
Que el dólar llegue a los 6,5 bolivianos, significa una devaluación del 15,2% en todo el año, debido a que en enero la divisa de Estados Unidos se cotizaba en 7,67 bolivianos, de acuerdo con los registros del Bolsín del Banco Central de Bolivia (BCB).
Para la ministra Toro, la política de manejo del tipo de cambio que viene llevando adelante el Gobierno ha sido conservadora, en comparación con otros países donde la depreciación del dólar fue mucho más fuerte.
“La depreciación (en el país) no llega al 8%... nosotros creemos que esto (la política) se va a mantener estable... entonces creemos que estamos llevando adelante una política adecuada”.
En un cuestionario respondido a este medio, el BCB señala que se debe tomar en cuenta que la actual apreciación del boliviano (o depreciación del dólar) “es consistente con el diferencial acumulado entre las apreciaciones de otros países y la de Bolivia, y además con el exceso de liquidez en moneda extranjera”. Aclara que el monitoreo a los mercados cambiarios externo e interno es constante. Añade que la devaluación también coadyuvará al control de la inflación, “en especial de la importada”.
Desde que empezó la devaluación del dólar, hasta agosto del presente año, el sector exportador del país perdió 240 millones de dólares, según datos de la Cámara Departamental de Exportadores de Santa Cruz (Cadex).
El gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, afirmó que, de concretarse el anunció de Toro, significará un golpe para los exportadores del país, porque se los expondrá a una “bancarrota”, ya que el poder adquisitivo de las divisas que reciben disminuirá en el tiempo.
El petróleo baja levemente
El precio del crudo de Texas bajó ayer levemente en el mercado neoyorquino y cerró a 109,35 dólares el barril, en medio de señales de que comienza a recuperarse la actividad petrolera en el Golfo de México, tras el paso del huracán Gustav.
El precio del barril de petróleo ha caído durante las últimas cuatro sesiones, entre signos de menor demanda de combustibles en EEUU y en otros países desarrollados y, además, a causa de la firme posición del dólar ante el euro y otras divisas.
Los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en octubre recortaron en 36 centavos su precio anterior, después de haberse negociado en torno a 107 dólares en algunos tramos de la sesión de ayer.
El gasóleo de calefacción para entrega en ese mes no registró variaciones significativas y concluyó la jornada a 3,0788 dólares el galón, un nivel similar al registrado el día anterior.
En cuanto al gas natural, los contratos para octubre cerraron a 7,26 dólares por mil pies cúbicos, sin apenas cambios con respecto al martes. Nueva York EFE
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