Hoy es difícil rechazar tantas ofertas y propagandas que inducen a obtener una tarjeta de crédito. Con tanto comercio y consumo, es fácil aceptar e incluso tener una, dos y hasta tres tarjetas de crédito.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que para tener una tarjeta de crédito se necesita utilizar disciplina. De hecho, el propósito de tener crédito es precisamente para personas o empresas solventes que pueden respaldar los gastos efectuados durante el mes. Por lo tanto, antes de firmar y comprometerse a las responsabilidades de obtener una tarjeta pregúntese lo siguiente:
1) ¿Realmente necesito esta tarjeta de crédito?
2) ¿Podré pagar los gastos mensualmente?
3) ¿Tendré la disciplina para pagar por lo menos el pago mínimo que me exige la tarjeta?
4) ¿Podré pagar el saldo completo cada mes?
Si contestó a estas cuatro preguntas con un resonante “sí”, entonces es un buen candidato para utilizar una tarjeta de crédito e incluso esto le ayudará a establecer un récord de crédito excelente para futuros negocios o adquisición de bienes.
Por otro lado, para evitar usar la tarjeta en cosas triviales, se recomienda que la utilice para viajes, compras de mayor valor o emergencias.
Es fácil utilizar la tarjeta y firmar el comprobante de compra, pero una vez que llega la factura a fin de mes, la realidad es diferente.
Evite utilizar su tarjeta para compras de supermercado y otros similares.
Finalmente, siga con estas recomendaciones para establecer y fortalecer sus hábitos en finanzas y emprender en un futuro financiero exitoso.
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