15 agosto 2011

Exportaciones y remesas bajarán como efecto de la crisis mundial

La crisis económica de Estados Unidos por su deuda de 14,3 billones de dólares, que a su vez ocasionó la caída de las bolsas de valores en varios países del mundo, tendrá en Bolivia dos efectos principales.

Uno de ellos será la reducción de las exportaciones de manufacturas, hidrocarburos, minerales; y, la otra, la disminución del ingreso de recursos económicos por remesas al país.

La exportación de productos no tradicionales en el país como la madera, el cuero, textiles, grano, oleaginosas, entre otras, se reducirán.

El presidente del Colegio de Economistas de Santa Cruz, Marcelo Nuñez, manifestó que los precios de estos productos tenderán a bajar y provocarán problemas en el 2012.

Los volúmenes de exportación de los hidrocarburos y minerales, que representan el 65 por ciento para el país, sufrirán también una baja porque los países que compran mineral para fabricar vehículos, computadoras y otros electrodomésticos no demandarán la misma cantidad.

Esto repercutirá también en los ingresos de los municipios y de las gobernaciones para ejecutar obras, pues éstos captarán menos recursos económicos por concepto del Impuesto Directo a los Hidrocarburos.

Por la reducción que habrá en el país a causa de una baja en las exportaciones, Nuñez recomendó al Gobierno nacional disminuir el gasto público para tener liquidez.

El presidente del Colegio de Economistas de Cochabamba, Pablo Cuba, coincidió con Nuñez al indicar que la crisis del sistema económico mundial afectará a las exportaciones y mencionó que se requerirá de un mediano plazo para recuperar la confianza en los mercados internacionales que demandan nuestros bienes y servicios.

Por su parte, el expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB) y de la Bolsa Boliviana de Valores Fernando Campero señaló que el sector de las finanzas no será afectado porque la economía de Bolivia está basada sobre todo en ahorros de los bolivianos que tienen su dinero dentro del país.

“Tenemos tasas de interés relativamente bajas y hay confianza en las entidades financieras, por eso no nos vamos a ver afectados”, dijo.

En el caso de las remesas que envían al país los bolivianos que viven en el exterior, éstas se podrían ver afectadas porque la crisis de Estados Unidos y Europa provocará que “nuestros compatriotas” reduzcan sus gastos.

Los economistas temen que algunos también puedan perder sus fuentes de empleo y tengan que retornar al país.

MEDIDAS DE

PREVENCIÓN

Ante la crítica situación económica a nivel mundial el Gobierno de Bolivia asumirá medidas de prevención para tratar de afrontar la crisis.

El vicepresidente Álvaro García Linera señaló que para reducir los posibles efectos en las exportaciones de manufacturas se deberá diversificar los mercados y elaborar productos de alta demanda.

Señaló que el Gobierno apoyará la producción agrícola pues considera que la demanda de estos productos no cederá.

Otra de las medidas es potenciar el mercado interno con la producción de alimentos.

Asimismo, el Gobierno anunció que una parte de las Reservas Internacionales Netas (RIN) cifradas en dólares, serán convertidas al oro.

En el caso de las remesas que los migrantes bolivianos envían al país, y que representan el 6 por ciento del Producto Interno Bruto, el Gobierno hará un seguimiento del comportamiento de la variable para ver qué medidas asume en caso de que haya una caída.

En cuanto a los bonos sociales que reparte el Gobierno a distintos sectores de la población se anunció que éstos no serán disminuidos ni suspendidos.

"Nosotros vamos a mantener nuestros gastos sociales, incluso vamos a mejorarlos porque eso dinamiza la economía en el mercado interno", afirmó el Vicepresidente.

SE MANTIENE

A pesar de la crisis económica que existe a nivel mundial el Banco Central de Bolivia (BCB) informó a través de un comunicado que la economía boliviana creció un 5,72 por ciento en el primer trimestre de 2011 y las estimaciones sugieren un crecimiento entre 5 y 6 por ciento este año.

“El sistema financiero tuvo un desempeño positivo (...). El boliviano es sólido y se encuentra en condiciones de enfrentar eventuales escenarios adversos a raíz de la crisis mundial”, señala el BCB.

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