El Fondo Monetario Internacional (FMI) valoró positivamente los resultados de la política macroeconómica del Gobierno y sugirió una política “prudente” sobre el gasto público de los ingresos provenientes de las exportaciones de gas a los países vecinos.
La jefa de la delegación del Fondo, Ana Corbacho, se refirió también a los riesgos de implantar el control de tasas de interés bancarias lo que podría traducirse en una menor rentabilidad y capitalización del sistema afectando la oferta de crédito. La funcionaria se abstuvo ayer de emitir un juicio acerca de la influencia del narcotráfico y la coca en la economía boliviana.
Corbacho calificó de “muy bueno” el desempeño macroeconómico de Bolivia desde mediados de la década del 2000 y dijo que “las políticas sociales han contribuido a un aumento importante del ingreso promedio de la población y a reducir la pobreza y la desigualdad en la distribución del ingreso”.
Sostuvo que el Gobierno asumió “una política prudente que conllevó al ahorro de parte de los ingresos provenientes del auge de los precios internacionales de los hidrocarburos, fortaleciendo la capacidad de la economía para resistir choques externos”.
Sin embargo, consultada sobre la influencia de la coca- cocaína en la economía, Corbacho optó por hablar de los mecanismos financieros para el control del lavado de dinero.
Resaltó que Bolivia salió de la lista oscura de los países que incurren en el lavado de dinero y se abstuvo de referirse a al tema del narcotráfico. La visita del organismo se enmarca en el Artículo IV del documento constitutivo del Fondo y que le permite realizar visitas anuales a sus países miembros. Bolivia no suscribió ningún acuerdo de apoyo con el fondo desde el 2006.
CONTROL DE INTERESES
La funcionaria del FMI aclaró que pese a las apreciaciones del organismo internacional sobre el manejo macroeconómico del Gobierno no tienen ningún carácter obligatorio para la administración del presidente Evo Morales, sin embargo advirtió que el control de intereses bancarios tanto para créditos como depósitos “podría acarrear riesgos a la estabilidad financiera”.
“La ley contiene varios elementos positivos que fortalecen la red de seguridad y la integridad del sistema financiero. El énfasis que otorga la ley a los objetivos de inclusión financiera y desarrollo productivo, también son apropiados, pero los instrumentos escogidos (por ejemplo topes a tasas de interés y cuotas mínimas de cartera) podrían traducirse en menor rentabilidad y capitalización del sistema financiero, y por tanto, una menor oferta de fondos prestables en el mediano plazo”, señaló al referirse a los decretos reglamentarios de la Ley de Servicios Financieros promulgada en agosto pasado. Corbacho dijo que el FMI aguarda la aprobación del decreto del régimen regulatorio de las tasas de interés para tener una opinión al respecto.
DISTORSIONES
La funcionaria del Fondo declaró asimismo que las distorsiones en el precio y asignación del crédito podrían complicar el manejo de la política monetaria y contribuir al sobreendeudamiento de ciertos grupos de la población. Sugirió que los objetivos planteados en la ley podría lograrse con otros instrumentos que mitiguen los riesgos sistémicos asociados al financiamiento de clientes pequeños o con poca experiencia financiera.
RIESGOS
Corbacho admitió que en la economía Bolivia registra una tasa de crecimiento más moderada que el 6.7 por ciento para el 2013, en línea con los términos de intercambio un poco menos favorables, no obstante –dijo- existen factores regionales y mundiales que podrían presentar riesgos a la baja; dos de los más importantes son una caída fuerte de los precios internacionales de hidrocarburos o una desaceleración de la actividad comercial con países vecinos. Al respecto la jefe de la misión del FMI sostuvo que el organismo multilateral evidenció “el holgado nivel de las reservas internacionales con las que cuenta el país permitiría a las autoridad mitigar el efecto adverso de choques externos si estos se materializarán”. Recomendó asimismo los esfuerzos en camino de industrializar el sector de materias primas y aumentar el valor agregado de las exportaciones, lo cual podrá ayudar a fomentar el crecimiento potencial y la diversificación de la economía.
RETOS
El equipo técnico del FMI consideró que para el Gobierno es prioritario asegurar que el alza reciente de los precios de algunos productos de algunos alimentos “no se transforme en un aumento generalizado de la inflación”. “Nuestras proyecciones sugieren que la tasa de inflación anual a fines de 2013, estará alrededor de 7.5 por ciento y que podrá disminuir paulatinamente durante el 2014, dadas las políticas en curso”, acotó.
Recordó que el Banco Central ha respondido al choque inflacionario retirando liquidez del sistema financiero, permitiendo una gradual aumento de las tasas de interés y procurando desacelerar el crédito al consumo. Indicó finalmente que “si las presiones inflacionarias demuestran ser más persistentes que lo esperado, será necesario continuar con el endurecimiento de las condiciones monetarias”.
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