Los bancos privados deben mejorar sus tasas de interés para competir con el Estado.
El Gobierno prevé recaudar más de 120 millones de bolivianos anuales por la emisión de los bonos del Tesoro Directo, afirmó el viceministro del Tesoro y Crédito Público, Edwin Rojas.
El programa entrará en ejecución bajo el Decreto Supremo 1121 que permite al Tesoro General desarrollar mecanismos de emisión de bonos de venta directa sólo a personas naturales.
Este servicio pretende dinamizar e innovar el servicio de captaciones mediante la venta de valores públicos al detalle. La perspectiva del Estado es recaudar como mínimo 10 millones de bolivianos por mes y alrededor de 120 millones de bolivianos al año.
“Se busca la redistribución de recursos en el ámbito financiero del país. Democratizar el acceso a instrumentos no tradicionales a los que la población no tiene acceso y, particularmente, establecer una tasa mínima en el sector financiero para las tasas pasivas”.
Los depósitos a plazo fijo (DPF) en la banca se concentran entre 1.000 y 140.000 bolivianos, razón por la que el Estado decidió implementar operaciones financieras en este rango.
La banca está obligada a mejorar sus tasas. Según la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi), la banca comercial ofrece tasas de interés en depósitos a plazo fijo entre el 0,08 y 3,85 por ciento, a diferencia de la nueva oferta del Gobierno que fluctúa entre 4 y 5,40 por ciento anual.
El Viceministro señaló que es necesario que las entidades financieras redistribuyan sus utilidades entre el público a través de mejores tasas para los depósitos y cambiar el “spread financiero”.
De acuerdo con la literatura económica, un spread de tasas de interés es la diferencia entre la tasa pasiva, que pagan los bancos por depósitos a los ahorristas, y la tasa activa, que cobran por créditos otorgados, principal fuente de utilidad de los banqueros.
Rojas afirmó que “el sistema financiero tiene un spread que de alguna forma castiga a la población, al pequeño ahorrista, al pagar tasas tan bajas por los ahorros y cobrar más por los préstamos. Vamos a generar una competencia en el interior del mercado”.
Añadió que si la banca privada no mejora o cambia su oferta para los ahorristas, éstos migrarán al nuevo servicio financiero que ofrece el Estado.
“Queremos un sistema financiero eficiente. Tenemos una banca que concentra riqueza y paga mal a sus ahorristas; que gane pero que redistribuya sus ganancias y que reconozca el sacrificio de sus clientes”.
Esta oferta no es para cubrir déficit. Respecto del destino de los recursos que obtendrá el Gobierno con la emisión de los bonos, Rojas explicó que éstos serán destinados a financiar proyectos de inversión y no para cubrir algún déficit del fisco.
“La recaudación que obtenga el Estado será mínima, casi marginal y, por lo tanto, no será para cubrir huecos financieros en el Tesoro General de la Nación. El Estado tiene ingresos por algo más de 25.000 millones de bolivianos y, por tanto, los ingresos por los bonos del Tesoro Directo no representan un fuerte ingreso”.
De lo que se trata es de alentar la mejora de la oferta de la banca.
200 mil bolivianos recaudó el Tesoro por la emisión de los bonos durante el primer día de vigencia.
9.532 millones de dólares son los depósitos en la banca comercial a mayo de 2012, según Asoban.
Los bonos del tesoro directo son colocados en el mercado financiero a través de valores la unión del banco unión en forma directa para las personas naturales. se pueden adquirir a sola presentación de la cédula de identidad.
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