Le di un billete de 100 dólares para que me cambie en bolivianos. El cambista tomó la plata, contó el dinero de su mano y me dijo que no le alcanzaba y me devolvió el billete, por lo que me dirigí donde otro cambista y este me dijo que el billete era falso", lamentó Daniel el engaño sufrido a manos de un librecambista callejero.
Testimonios como este ocurren a diario en la ciudad donde personas inescrupulosas escudadas en el oficio de “cambistas” están engañando a la población cambiando dólares verdaderos por falsos con el famoso truco del “cambiolín” (recibir dinero verdadero y cambiarlo por falso).
Este fin de semana dos mujeres se sumaron a la lista de personas engañadas cuando realizaban transacciones en sitios comerciales. "Me acuerdo haber contado bien la plata, incluso él contó delante mío el dinero (1.384 bolivianos), pero cuando quise sacar para realizar una compra, me faltaban 100 bolivianos", se quejó Mariela M., una mujer que se mostró sorprendida por la agilidad que utilizan para cambiar los billetes y engañar a quienes requieren de cambio de moneda extranjera a boliviana o viceversa.
La otra afectada, que prefirió el anonimato, denunció que a ella le engañaron cuando cambió euros en moneda boliviana. Ese día (domingo) como no habían entidades financieras abiertas así que decidió ir donde se sitúan los cambistas.
“¿Cuántos va a comprar?”, preguntó el cambista. La perjudicada le dijo que 500 euros a bolivianos. En ese momento le entregó el dinero para que el supuesto cambista lo contara y le entregara al tipo de cambio en Bolivia. Pero en esta operación el sospechoso habría guardado dinero del monto real a entregar sin que su cliente sospeche. "No son todos, hay algunos que se dedican a esto, lo malo es que cuando uno reclama se hacen los desentendidos y por último se molestan", criticó.
El gremio se defiende. Unos librecambistas consultados sobre estos engaños reconocieron que hay colegas que se dedican a esta actividad, particularmente los fines de semanas cuando no trabajan las entidades financieras ni casas de cambio."Le puedo asegurar que hay buenos cambistas como hay malos que se dedican a engañar a sus clientes.
Esto de sobremanera nos perjudica porque va a llegar el momento cuando la gente no confíe en nosotros y nos deje sin trabajo", explicó un trabajador prefiriendo guardar reserva de su nombre.
La estrategia de los timadores es entregar los billetes y marear a sus víctimas con una suerte de juego de manos y palabras. La Policía recomienda en estos casos que cuando una persona realice una transacción comercial callejera anote el número de serie de su billete en el caso de dólares o euros y cuente el dinero por separado.
Consejos
1.- Anote los números de serie de los billetes que le pertenecen, antes del cambio, haciéndolo conocer al cambista.
2.- Evite la aglomeración de cambistas ofertantes, solicite identificación del cambista y autorización municipal antes de la operación.
3.- El lugar debe ofrecer seguridad e iluminación, evite efectuar el cambio en lugares de poca visibilidad.
4.- Verifique los billetes que sean verdaderos, antes de efectuar la transacción desengrampe el fajo de billetes monedas para poder verificar bien su autenticación, que la nominación y números sean coincidentes y que no tengan adherido cantidades superiores.
5.- Cuando reciba los billetes de una transacción comercial realizada en la calle cuente por separado su dinero a fin de evitar que se lo roben.
6.- En caso de ser engañado y usted tenga el número de serie de su billete, informe inmediatamente al policía de la zona.
7.- Recabe la mayor cantidad de datos de la persona que lo engañó como rasgos físicos y si es posible el nombre.
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