Los bancos privados han estado ganando mucho dinero a costa de los ahorristas que perciben tasas de interés ínfimas por depósitos a plazo fijo, y que en el mes de mayo pasado llegaron a 0.08 por ciento por depósitos a un año plazo, advirtió el viceministro del Tesoro y Crédito Público Edwin Rojas.
Ese es uno de los principales argumentos gubernamentales para la emisión de los llamados bonos Tesoro Directo, que se venden al público por un monto mínimo de 1.000 bolivianos y de un máximo de 140.000 bolivianos para una misma persona.
Explicó que esa iniciativa tiene dos objetivos estratégicos de largo plazo que fusionan tanto el ámbito económico como el ámbito social.
“En Bolivia, lo que se ha venido dando en el último tiempo, es que el sector financiero ha venido acumulando mucha riqueza y hablo de la banca tradicional que ha venido acumulando mucha riqueza, lo que iba en desmedro del ciudadano común, del pequeño ahorrista porque le paga muy bajas tasas de interés pasiva”.
Agregó que se debe reflexionar en sentido de que en el país, la población tiene poco acceso a instrumentos financieros lo que se agrava en el ámbito rural.
“Considerando estos dos aspectos se lanza el bono Tesoro Directo con dos objetivos. Se busca que en el sector financiero exista redistribución de los recursos, de la riqueza y que el pequeño ahorrista tenga un pago de interés mucho más acorde al sacrificio que le llevado a juntar algunos recursos para poder invertirlos en el ámbito tradicional”. El viceministro Rojas señaló que es necesario que en Bolivia exista un proceso de democratización y acceso a los recursos e instrumentos financieros.
Explicó que el objetivo de los nuevos bonos es que el público meta sean personas naturales, ciudadanos de a pie. “En el estudio de mercado que efectuamos habíamos detectado que prácticamente, un 75 por ciento de los pequeños ahorristas hace inversiones en DPF (Depósitos a Plazo Fijo) y los montos que manejan son de entre 1.000 y 140.000 bolivianos. Está dirigida a ellos, esta política”.
Afirmó que las empresas, los grandes bancos, los Fondos de Pensiones, y otras instituciones que manejan mucho capital, no van a participar de este instrumento o bonos. “Ellos tienen otro mercado que son las operaciones de mercado abierto que semanalmente se realizan en el Banco Central de Bolivia”.
“Este es un instrumento innovador que llega de forma directa a la población, al ciudadano que tiene recursos y quiere tener una redistribución justa por el sacrificio que le ha llevado juntar sus recursos”.
La vigencia y venta del bono Tesoro Directo es indefinida, según informó el Viceministro del Tesoro instituido mediante Decreto 1121. “La intervención del Estado en la economía es un mandato constitucional y esta vez lo hacemos interviniendo de forma indirecta en el mercado financiero, buscando que el sistema financiero reaccione, sea más eficiente, genere redistribución de la riqueza hacia población que, a lo largo de los dos últimos años, han pagado tasas de interés absolutamente bajas”.
“Ha habido un proceso de concentración de riqueza a costa de lo que es el pequeño ahorrista”, insistió.
Recordó que en el último tiempo los depósitos a plazo fijo, “que es el instrumento financiero que más se asemeja al bono del Tesoro, ha estado pagando tasas mínimas de hasta 0.08 por ciento y una tasa máxima al 10 de junio de 1.71 por ciento para depósitos a un año plazo. En este mismo plazo el bono Tesoro Directo paga el 4 por ciento de interés, más del doble de la tasa de interés para el ahorrista”. El viceministro Rojas añadió que la diferencia con la banca privada es que el Estado pagará en forma semestral, en tanto que un Depósito a Plazo Fijo paga los intereses en forma anual o por periodos más prolongados de tiempo.
Los recursos captados por la venta de estos bonos serán canalizados hacia la misma economía como parte del programa oficial de inversión pública. “Estos recursos van a apalancar estas inversiones, de manera tal que vamos a tener una redistribución de ingresos. La economía seguirá manteniendo el dinamismo, el Tesoro va a percibir recursos que vendrán por coparticipación en impuestos y garantizamos el repago de los recursos mediante la cancelación de intereses y la devolución del capital al final de los plazos pactados”.
Tasa de interés llegó al 0.08 por ciento
Las tasas de interés pasivas que reconoce la banca comercial a los ahorristas, son tan bajas que el 20 de mayo pasado la mínima se ubicó en 0.08 por ciento para depósitos a plazo fijo de un año (360 días).
Según un documento oficial sobre evolución semanal de tasas de interés pasivas en depósitos a plazo fijo, al 20 de mayo pasado, se tenían estos datos: El Banco Nacional de Bolivia con 0.53 por ciento por 360 días, el Banco Mercantil Santa Cruz 0.80 por ciento y por 720 días 1.19 por ciento. El Banco de Crédito de Bolivia 0.08 por ciento por 360 días y por 720 días de 1.50 por ciento.
El Banco BISA tenía una tasa de interés de 0.36 por ciento por 360 días y 0.85 por ciento para 720 días. El Banco Unión 0.54 por ciento para 360 días y 1.50 para 720 días. El Banco Económico 0.58 para 360 días y 1.99 para 720 días. El Banco Solidario 2.40 para 360 días y 2.72 para 720 días. El Banco FIE 1.89 para 360 días y 1.58 para 720 días. El Banco Los Andes 1.98 para 360 días y 2.20 para 720 días.
En promedio, al 20 de mayo pasado, se tuvo una tasa mínima de interés pasiva, en depósito a plazo fijo, de 0.08 por ciento y una máxima de 2.4 por ciento.
El pasado 10 de junio, se había producido un alza en las tasas de interés, con una mínima de 0.8 por ciento y una máxima de 2.93 para depósitos a un año plazo.
Estas tasas de interés son consideradas en extremo bajas por las autoridades de Gobierno.
Con los bonos Tesoro Directo, el Ministerio de Hacienda estableció una tasa de interés de 4 por ciento para un año, 4.50 por ciento para dos años, 4.80 por ciento para tres años, 5.10 por ciento para cuatro años y 5.40 por ciento para 5 años.
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