La Asociación de Instituciones Financieras de Desarrollo (Finrural) considera que la fijación de tasas para los créditos, por ejemplo del sector agrícola, puede resultar perjudicial y constituirse en un desincentivo para varias entidades.
“Una fijación de tasas de interés para el sector agrícola puede resultar perjudicial para las instituciones que tienen una concentración 90% de su cartera en crédito agrícola; al contrario de una profundización y bancarización en zonas alejadas, puede ser un incentivo perverso para que las instituciones dejen de colocar este tipo de créditos”, aseguró el presidente de Finrural, Gonzalo Alaiza.
Este sector también hizo conocer ayer sus observaciones a la Comisión de Planificación, Política Económica y Finanzas de la Cámara de Senadores.
El gerente general de Finrural, Néstor Castro, precisó que puede haber desincentivo porque si la tasa de interés está por debajo de la banda de los costos de operación y de riesgo, ya no sería atractivo colocar créditos en regiones donde habitualmente operan estas entidades.
En criterio de Alaiza, el sector financiero hace esfuerzos para disminuir las tasas de interés y dar a los clientes mejores alternativas de financiamiento, “pero considerando una diferenciación entre las tecnologías crediticias, los productos, las garantías y las zonas donde se coloca la cartera”.
Las observaciones formuladas por Finrural y las otras organizaciones financieras que participaron ayer en la reunión en el Senado serán analizadas en esta nueva legislatura.
El presidente de la comisión, Mario Choque, dijo que todos los sectores serán convocados nuevamente.
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