Se trata de la décima serie que ponen en circulación desde 1986, tiene nuevas medidas de seguridad y hasta 2016 se distribuirán todos.
El 47 por ciento de los billetes, que se decomisaron en la gestión 2014, corresponde al corte de 20 bolivianos, por lo que el Banco Central de Bolivia (BCB) se vio en la necesidad de poner en circulación, a partir de ayer, la nueva serie "J" con mayores medidas de seguridad.
En un acto especial que se realizó en el piso 27 del edificio del BCB, el presidente de la entidad financiera, Marcelo Zabalaga, anunció la puesta en circulación del billete de Bs 20 de la serie “J”, lo que fue comunicado al público y al sistema financiero, mediante una resolución de Directorio.
En la oportunidad, explicó que se mantiene el diseño, es decir, la temática y los personajes de los billetes en actual circulación y se incorpora un hilo de seguridad para mejorar su autenticidad.
Este corte incorpora un nuevo hilo de seguridad de 3 milimetros de ancho, lleva la sigla BCB, el valor del billete y sobresale nítidamente. Presenta, además, un efecto de cambio de color de verde a magenta, que es apreciable al inclinarlo. Asimismo, posee una fluorescencia azul visible bajo luz UV (luz negra) por ambos lados del billete.
El billete de Bs 20 de la nueva serie “J” mantiene las dimensiones, material, imágenes, colores y las medidas de seguridad de las series anteriores.
En forma gradual, en el transcurso de los próximos meses, el BCB ha previsto introducir al mercado denominaciones de Bs 10, Bs 50, Bs 100 y Bs 200 correspondiente a la serie “J”. Zabalaga insistió en que los billetes de las series anteriores mantienen plena validez y son de curso legal.
LOS MÁS FALSIFICADoS. El Presidente del BCB informó que los billetes de 20 bolivianos son los más utilizados por la población, debido a su valor y porque sirve para realizar compras menores. Esto hace que sea atractivo para los falsificadores, por lo que el BCB optó por poner en circulación un nuevo modelo con mayores medidas de seguridad con la recomendación al público de que debe mirarlo, tocarlo e inclinarlo para evitar la recepción de billetes falsos.
Al margen del hilo de seguridad un poco más ancho, también se incorpora la marca de agua, que es perceptible cuando se mira el billete a trasluz; tiene una impresión en alto relieve, que es perceptible al tacto, los textos, los numerales y las barras sobresalen y fáciles de percibir al tocarlos.
Los billetes fueron impresos en un papel especial, cien por cien algodón, cuyo grosor, calidad y textura son fáciles de percibir al tacto. También contiene fibrillas o pequeños hilos de colores amarillo, rojo, verde y azul, que se encuentran dentro del papel de manera aleatoria.
El número total de piezas que fueron solicitadas por el BCB para la serie "j" supera los 361 millones de unidades, con una inversión de 18,5 millones de dólares, que se realizó mediante una licitación pública internacional. La francesa Oberthur Fiduciare se adjudicó la impresión. Se espera que hasta el próximo año se pongan en circulación todos los cortes de la nueva serie y serán unos 80 millones de piezas que serán distribuidas en todo el país.
Actualmente, las entidades financieras retiran el nuevo material de las bóvedas del BCB, de acuerdo con sus necesidades y son trasladadas a sus oficinas mediante empresas transportadoras que son pagadas por ellas.
361.1 millones de piezas circularán por todo el país en cortes de 20 bolivianos, según informó el BCB.
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