El sector de la pequeña y mediana empresa (Pymes) creció en los últimos años mejorando su contribución al desarrollo nacional. Las entidades especializadas en microfinanzas y las Instituciones de Financiamiento de Desarrollo denominadas IFD, fueron –hace muchos años– las pioneras en incursionar en ese mercado. Con la Ley de Servicios Financieros 393, promulgada en agosto de 2013, los grandes bancos volcaron su mirada al sector, y ahora diseñan una variada gama de productos y, paralelamente, elaboran estrategias para incorporar a su cartera a pequeños y medianos emprendimientos, que generan múltiples dinámicas productivas y empresariales en el país.
CIFRAS
Un reporte de Fundempresa, entidad privada concesionaria, que se encarga del registro de comercio en Bolivia, señaló en su informe a junio de este año que actualizaron sus datos, 93.394 unidades productivas y de servicios, de las cuales, 75.000 son unipersonales. Hay 16.245 sociedades de responsabilidad limitada, 1.393 sociedades anónimas y menos de 260 sociedades de tipo societario.
MERCADO FINANCIERO
La democratización del crédito en Bolivia es uno de los pilares de la Ley 393. Es en ese ámbito donde muchos bancos con perfil corporativo han asumido el desafío de ampliar su cobertura a unidades productivas denominadas Pymes.
BANCA PYME
Pero algo que se pudo evidenciar es que existe en estas entidades algunas que se denominan “banca Pyme” y que se encuentran en competencia con otras entidades del sistema, cuya finalidad es desarrollar el mercado financiero del país, adecuando su cartera y apuntalando este tipo de iniciativas. El último informe del Foro Económico Mundial (WEF en sus siglas en inglés) identifica que el acceso a servicios financieros pesa a la hora de hacer negocios en Bolivia, según el Índice Global de Competitividad 2014-2015. El estudio revela que el país bajó al puesto 117 en el ranking de naciones en competitividad global, perdiendo 12 ubicaciones. Este aspecto resulta un elemento clave para entender el despliegue de la banca tradicional corporativa en busca de mercados que en el pasado eran dominio casi privativo de las entidades financieras de desarrollo (IFD).
ESCENARIO
El Estado ingresó también en el mercado financiero a través del Banco de Desarrollo Productivo (BDP) y Banco Unión. Son dos entidades nuevas en el mercado. El BDP inició operaciones en 2008 y su primera finalidad fue otorgar crédito a microempresarios pero con fines electoralistas y políticos. Así lo señaló el presidente de la Fundación Milenio Roberto Laserna, en el prólogo de la publicación “¿Dónde está la plata?”. En tanto, Banco Unión, con 36 años en el mercado, pero desde 2007 bajo la administración estatal, fue capitalizado con $us 50 millones y desde ese año la cartera de depósitos creció ocho veces, dijo su gerente Marcia Villarroel.
CARACTERÍSTICAS
- Las Pymes son manejadas por sus propietarios y
entorno familiar
- Tienen como máximo de 11 a 50 empleados
- Unidades económicas familiares
- Combinan los recursos humanos entre familiares y
personas ajenas
- Valor de sus ventas anuales es $us 1,200,000
- Valor de activos no supera $us 100,000.
- Pueden lograr niveles de ahorro
- Finanzas del negocio registradas contablemente
- Acceso al sistema bancario y a servicios no financieros
- Su capacidad técnica y de gestión es limitada
Fuente.- Las Pymes en Bolivia, Rubin Dorado Leigue
SERVICIO “CUENTAS POR COBRAR”
Mauricio Dupleich, gerente de la Sociedad Administradora de Fondos de Inversión Fortaleza (SAFI), explicó que la institución ha creado un servicio financiero llamado “cuentas por cobrar”, orientado específicamente a las Pymes. Este mecanismo hace posible que una Pyme que exporta o vende un producto o servicio a una empresa grande en Bolivia o del exterior pueda recuperar el valor de la factura acelerando el giro de la actividad y evitando frecuentemente varios meses en espera para cobrar la cuenta, que se traduce en un costo financiero adicional. La liquidez que entrega el fondo de Fortaleza a la Pyme debe cumplir ciertos requisitos que hacen efectiva y segura la transacción. El fondo se descuenta una comisión por la operación que resulta ser razonablemente aceptable para la Pyme y que hace posible que el negocio no se detenga.
CIFRAS
De acuerdo a datos de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), el crecimiento del sector es sostenido en Bolivia. A septiembre de 2014 los créditos para Pymes, con calificación empresarial, llegaron a Bs 10.999 millones, mientras a junio de 2015, la cifra alcanzó a Bs 11.816 millones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario