De acuerdo a datos de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiera (ASFI), en Bolivia existen 66 entidades financieras, entre cooperativas y entidades de desarrollo, que están en proceso de adecuación a las normas exigidas, por el ente regular.
De todas estas, 52 son cooperativas de ahorro y crédito societarias. De esta cantidad, 16 ya dieron un primer paso en su proceso y cuentan con certificado de adecuación. Por otra parte, 36 iniciaron la adecuación pero aún no cuenta con este documento.
Otras firmas ligadas a este negocio que buscan regularizarse son las instituciones financieras de desarrollo, en total son 14. De la cifra mencionada, según la ASFI, nueve se encuentran trabajando con Certificado de Adecuación, y el restante no.
En la gestión 2012, la ASFI revocó la licencia de funcionamiento de 311 cooperativas que contaban con licencia de funcionamiento emitida por la Dirección General de Cooperativas (Digecoop), pero que hasta esa fecha no prestaban ningún tipo de servicio.
Proceso. De acuerdo al listado oficial del ente regulador, 14 cooperativas presentan Observaciones en el proceso de regularización. Además, hasta la fecha cuatro aún no han presentado información sobre sus operaciones. Dentro de la lista, existe una cooperativa que presenta observaciones y por la cual la ASFI, ha dispuesto la Revocatoria del Certificado de Adecuación, según la resolución Nº759/2013 emitida el 19 de noviembre de la pasada gestión.
Sin contar, a las 52 que se están regularizando, cinco entidades corren suertes distintas. Por ejemplo, las cooperativas Nuestra Señora de Cotoca Ltda y San Luis Ltda, se encuentran en proceso de liquidación voluntaria. Una peor situación tuvieron Coomype Ltda y El Pauro, ya que la ASFI, desestimó la continuidad de ambas instituciones en el proceso de adecuación, a través de dos resoluciones emitidas en agosto y noviembre del año pasado.
Por último, el ente fiscalizador inició un proceso judicial de quiebra de la cooperativa Intercoop. Esta al igual que las mencionadas funcionaba en Santa Cruz.
Con relación a las instituciones financieras de desarrollo, nueve cuentan con certificado de adecuación y cinco no cuentan con el mismo. Y dos entidades presentan observaciones.
Todas deben ser reguladas. Según el analista, Ludwing Toledo, en la actualidad todos las entidades que prestan servicios financieros deben adecuarse a las normas que fija el Estado.
Con relación al sector cooperativo, señaló que "las que tienen problemas son aquellas que no tienen licencia de funcionamiento. Deben adecuarse en plazo prudencial, pero todavía no hay un plazo establecido".
El experto explicó que todas las entidades financieras necesitan un gran grado de fiscalización.
"En todas partes del mundo, la fiscalización es necesaria. Ya lo hemos visto en las crisis financieras del año 2008, que quebraron varios bancos que parecían sólidos, pero que no tenían la fiscalización adecuada", recordó.
En la actualidad existen en el país 26 cooperativas que cuentan con licencias de funcionamiento.
A esto se suma 13 bancos, cuatro fondos financieros privados. Además de ocho Mutuales de Ahorro y Crédito. Las entidades reguladas que cuenta con licencia de operación colocaron más de 12.000 millones de créditos hasta junio.
"Se va a iniciar estos procesos de cierre a aquellas cooperativas que no hayan iniciado este proceso de adecuación,
en lo posible evitando cualquier alteración en el sistema cooperativo, y esto siempre evitando no afectar al socio cooperativista”.
Lenny Valdivia
Directora de la ASFI
"No pueden esperar, tienen que gestionar y demostrar que pueden ser sujetos de fe pública,
todas las entidades financieras necesitan un grado de fiscalización. En todas partes del mundo el control a los sistemas financieros es necesaria”.
Ludwing Toledo
Economista
Sector
Bolivia ha mejorado la fiscalización de las entidades financieras
Tropiezos. Para el expresidente del Banco Central de Bolivia, Armando Méndez, la fiscalización del sector financiero ha mejorado en los últimos años, producto de los fuertes tropiezos que sufrió en la década de los ochenta.
"En Bolivia, hay una buena regulación y se deben a los errores que se hizo hasta antes del 85 en el tema bancario”, apuntó la exautoridad.
En el país entre los años 1980 y 2000, al menos 27 bancos, mutuales y cooperativas quebraron.
En ese periodo, el Banco Central de Bolivia (BCB) desembolsó cerca 500 millones de dólares para devolver el dinero a los ahorristas.
Control
Existen 58 casas de cambio con licencia para operar
Regularización. De acuerdo a la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), en el país existen 58 casas de cambio que cumplieron todos los requisitos para la atención del público.
De este número, la mayoría (23) se encuentran trabajando en La Paz y El Alto.
Otra buena cantidad (14), se encuentran en Santa Cruz. En Potosí existen 12 autorizadas, principalmente en Villazón.
En el departamento de Cochabamba, son cinco las casas de cambio autorizadas, esta misma cantidad funcionan en Cobija y solo tiene la autorización de la ASFI para operar en la ciudad de Guayaramerín.
Control. En el marco de la implementación y ejecución de las políticas institucionales, la ASFI inició en 2011 el proceso de incorporación y adecuación de casas de cambio como Empresas de Servicios Auxiliares Financieros, así como su constitución, funcionamiento, disolución y clausura, señala la entidad.
Punto de vista
Armando Méndez
Expresidente del BCB
"Si prestan mal pierde el ahorrista'
En cualquier parte del mundo las entidades financieras son reguladas internamente por los estados.
La primera razón para ser reguladas es que estas entidades trabajan con el dinero ajeno, con el ahorro de las personas.
Si prestan mal, pierde el ahorrista. Por eso las entidades deben ser reguladas para garantizarle al ahorrista su dinero.
Por tanto, es importante que estas entidades se regulen, mediante la ASFI, como garantía para que la gente deposite sus recursos, por tanto eso es necesario.
Cuatro gatos no pueden hacer una financiera se requiere de cierto capital y condiciones, que a veces no tienen las cooperativas, porque hay muchas personas que quieren jugar con el dinero ajeno, y cuando llegan los problemas, quieren pasar el bulto al Estado. Por eso, ninguna entidad financiera que no esté siendo regulada y reconocida puede acudir al Banco Central, cuando tiene problemas.
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